Afirman Red Fang que aún sienten que Mastodon, Baroness, Clutch y Melvins están a otro nivel. La modestia añade valor a un disco que los acerca más que nunca al estatus de las citadas bandas. Sí, estamos ante ese tipo de disco que marca la diferencia, que hace renegar a algunos por la supuesta pérdida de las esencias –no se engañen, sigue siendo cien por cien Red Fang- y que abrirá los ojos a miles de nuevos seguidores. Más variedad, más registros, más colores; y una mejor producción que no implica pérdida de inmediatez y autenticidad. Directos y aparentemente sencillos pero plagados de detalles, los nuevos temas de los de Portland se retuercen y palpitan con las maneras de un animal majestuoso, vital y poderoso. “Blood Like Cream” funciona de forma excelente como single pegadizo; la contundente “Crows In Swine” y su galopante riff tienen un deje a Mastodon pasado por el filtro de Red Fang; y el pasado punk hardcore de sus miembros asoma de forma evidente y mejor integrada de lo habitual en los coros de “No Hope”. En la recta final brillan especialmente la hímnica “Failure” y “Every Little Twist”, con un irresistible halo a QOTSA; mientras que el polvoriento down tempo stoner-sludge de “Dawn Rising” condensa en siete minutos todas las facetas de un disco que mejora, en su conjunto, la apuesta de logros pretéritos. Un valiente paso de gigante.
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