Velocidad de crucero

Va bien esto de tener amistades que, en charlas de café o copa, y sin apenas darse cuenta, te solucionan esto de las críticas de discos.

Decía uno de ellos, hace bien poco, al respecto de la canción “Copas de yate” ( “Se hacen los interesantes” 04) que el proyecto de Fran antes Fernández ahora Nixon con Sergio Algora (ya, hay más músicos, sí...), siendo extremadamente prolífico e irregular, viene dejando dos o tres perlas por disco realmente impagables. Pues es eso. Sigue siendo así. En La Costa Brava de “Velocidad de crucero”, las Cadaqués, Tossa y Begur son las magníficas “Te cambio por un mundo donde no valga la pena”, “Japonesa”, “Casado con otra” o “El hombre que perdió los papeles” (con unos vientos de entrada preciosos). Lo malo es que, como también es habitual, hay más Llorets y Calellas de lo deseable, canciones obvias y con demasiadas palabras sobrantes como esos pueblos tienen guiris molestos. Y si “Dispositivo” no se parece al **** “Maracaibo” de La Unión... La multimezcla de estilos, el gusto por los setenta españoles y la voluntad de forzar el talento pop siguen ahí. Pero si bien Bond decía que “en el riesgo está el placer”, en el riesgo también está... el riesgo. Ah!, Oscar al Título Cabrón del Año por “Natasha Kampush (hazme una perdida)”.