Underwater Moonlight

Justícia histórica. Decir que uno de los discos más refrescantes que he escuchado en lo que llevamos de año ha sido la reedición del segundo Lp de los Soft Boys puede sonar a bravuconada snob. Puede. Pero pocos descubrimientos discográficos han cosquilleado mi alma pop como esta maravilla atemporal con la que Robyn Hitchcock & Co. incidían en su personal apuesta a principios de 1980. Un año antes, el Ep “Wading Through A Ventilator” presentaba a los chicos blandos como una formación atípica e incómoda de ubicar (¿new wave?, ¿post-punk?, ¿power-pop?).

La reconstrucción llevada a cabo por Matador nos devuelve su mejor trabajo (“A Can Of Bees” e “Invisible Hits” completan su lustro de vida discográfica) aumentando el disfrute original con nueve temas extra (versión del “Vegetable Man” de su admirado Syd Barrett incluída) y un CD bonus (“... And How It Got There”) que rebosa outtakes, caras B, idas de olla y dos reveladoras apropiaciones del “Leave Me Alone” de Lou Reed y el “Over You” de Roxy Music. La gira de reunión de Robyn con Kimberly Rew, Mathew Seligman y Morris Windsor debería completar el proceso de dignificación del nombre de los Soft Boys, acercando su vibrante e imperecedero sonido a los hijos de la generación MP3.

Déjate arrastar por esa perla de pura ensoñación pop guitarrera que es “Kingdom Of Love” y dime si no está justificada la reivindicación del genio en la sombra que fue (y sigue siendo) Hitchcock. “I Wanna Destroy You” y su desfachtez punk; “Positive Vibrations” con Rew cruzando a Rick Nielsen con Ravi Shankar (!!), el crescendo estallido pop-punk de “Insanely Jealous”, el amenazante instrumental “You´ll Have To Go Sidewalks”, la oda Byrds de “The Queen Of Eyes”... todo para llegar al estribillo de la pegadiza “Underwater Moonlight”. Sumérgete y verás la luz.