Sería fácil emparentar a los gerundenses Two Dead Cats así de primeras con unos Pretty Girls Make Graves más asilvestrados o con el gancho melódico de Bikini Kill, e incluso con los más cercanos Maple o Sibyl Vane, pero como las referencias ajenas siempre ocupan demasiado espacio, sirvan esos nombres únicamente como aviso a navegantes y desconocedores de esta novel banda que combina castellano e inglés en la voz de su cantante Gemma.
Metidos en harina, “The Cojin” inaugura el rock animalado que más tarde se irá calmando, al que le siguen los jugueteos nerviosos en “Vaginist Church”, la tranquilidad en “Acoustic Delirium”, el pop contenido de “I´m Always Hot”, el arrebato punkarra en su tema homónimo, los cellos que adornan “Before The Calm”, la intensidad de “Pupici” o emotividad desgarrada de “Anorexic Cabaret” y desemboca, como colofón, en “Chico Remolacha”, un título digno de El Niño Gusano, grupo este sí con el que no comparten absolutamente nada aunque sea ésta su pieza más amable. Un debut entretenido, unas canciones inmediatas y pegadizas con un sonido muy destartalado, una personalidad por pulir pero bien encaminada y con buenos referentes... no está mal del todo para empezar.
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