La historia de Two Lone Swordsmen es básicamente la del alter ego de Andy Weatherall, en la cual trata de dar forma a un proyecto en el que poder exteriorizar, sin ningún tipo de reparo, su vertiente más funambulista. Lo consigue junto a Keith Tenniswood, otro personaje invadido por la esquizofrenia sonora, que, entre otros, ha trabajado con The Aloof, David Holmes y Red Snapper.
“Tiny Reminders” se convierte en el tercer trabajo de este dúo y, como el propio título indica, viene a ser un pequeño recordatorio de que todavía son capaces de navegar por océanos remotos (o desconocidos, si cabe), por los que muy pocos se han atrevido surcar. El álbum derrocha sincretismo en una búsqueda (acentuada en esta ocasión) del minimalismo descriptivo. Cuesta reconocer al Andy Weatherall que no hace mucho dijo aquello de que “toda mi base proviene del rock´n´roll. The Clash son todavía la mejor banda del mundo”, en un disco plenamente experimental, donde aún cabe la posibilidad de rastrear muy tenuemente su pasado acid house (“Neuflex”). También se recogen consignas, ya olvidadas, de un primer techno con marcado acento alemán (“You Are...”), que acaba extendiéndose a gran parte de los diecinueve temas que conforman el disco.
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