Por encima del propio Method Man, quien más necesitaba un disco como "Tical 2000: Judgement Day" era el colectivo Wu-Tang en símismo. Nos habíamos acostumbrado a las medianías (Killah Priest,Wu-Tang Willah Bees, Sunz Of Man o Killarmy) y se necesitaba, casi de inmediato ,un revulsivo. El segundo álbum en solitario de Method Man, una de las mejores gargantas neoyorkinas de los últimos años, es ese revulsivo. Vuelta a empezar. Si "In Stereo", debut de RZA bajo la firma Bobby Digital, se ha quedado en un disco de intenciones,"Tical 2000" es, por su parte, un disco de resultados. Lo mejor que ha hecho el clan desde "Wu-Tang Forever". Con la catarsispre-milenaica como concepto, Method Man ha vuelto a la superficie con un trabajo denso, abrupto, mastodóntico (veintiocho temas)... certero.The RZA, Inspectah Deck (ahora detrás de la mesa), Erick Sermon (dos temas; Redman apoya uno), Prince Paul, The Trackmasters (apadrinando, cómo no, el hit del disco), Havoc (también en los recitados junto a Prodigy: la firma Mobb Deep sigue causando estragos) y los habituales subalternos del clan (True Master, 4th Disciple y Mathematics) se reparten las tareas de producción de un trabajo en el que, por primera vez en un año dentro del clan, forma y fondo andan (bien) cogidos de la mano. Espectacular.
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