Hubo un tiempo en que un grupo podía sacar dos discos al año (los Stones llegaron a publicar diez títulos durante sus tres primeros años de carrera). Hoy, en cambio, es extraño encontrar tal proliferación discográfica, aunque siempre hay excepciones. Una de ellas, gloriosa excepción, la protagoniza Will Oldham, que acaba de planchar su sexto disco en dos años (tres de originales, dos directos y uno de autoversiones). Y lo cierto es que hay que brindar por ello porque, lejos de comprometer la calidad de sus grabaciones, Oldham ha acabado por no dar puntada sin hilo.
“The Wonder Show Of The World” va ligero de instrumentos, con las guitarras de Emmett Kelly como timón (no necesariamente acústicas, como en las balada cósmica “Teach Me To Bear You”), y se recrea en ese folk despacioso y un tanto oscuro que envuelve (“Merciless And Great”), que deslumbra a poco que deja entrar la luz (“That’s What Our Love Is”) y que en cuanto puede viaja armónicamente a los sesenta (“Someone Coming Through”). Se recrea sin caer en la autocomplacencia y otros pecados pretéritos. Gracias a ello, vuela muy alto.
Hey Candace! Congratulations your pictures are over the top wofdrenul!! I have known the Jones family since before they had children. They lived in the apartment behind us as newlyweds in Toronto when Tyler was studying! How fun it was to get caught up with them through your pictures and see how their family has grown! Thank you, Alison