Cuatro años después del celebrado “Live Drugs” (Super High Quality, 20), la banda encabezada por Adam Granduciel repite formato y lanza al mercado el que es ya segundo álbum en directo en el currículo de The War On Drugs. La maniobra, que en principio podría parecer algo excesiva o cuando menos reiterativa, despacha conjeturas de un plumazo en base a la calidad y potencia del sonido que planea sobre todo el álbum, así como a ese tipo de realismo (y posteriores emociones específicas) que debe desprender un concierto impecablemente tocado y, de paso, engalanado con inspirado repertorio.
Un total de trece temas que relucen especialmente vívidos en su versión sobre el escenario, mientras funcionan como representativo repaso por la carrera cosechada hasta la fecha por el grupo de Philadelphia. “Live Drugs Again” se aleja diametralmente de esa sospecha que puede acompañar a las referencias de este tipo y, en efecto, puede presumir de capturar la intensidad del grupo sobre las tablas. Desde las inciales “Harmonia’s Dream” y “Burning” a los preciosos medios tiempos “Old Skin”, “Living Proof” y “Slow Ghost” –mecidos con un buen gusto apabullante–, pasando por clásicos del grupo del tipo de “I Don’t Wanna Wait”, “Under The Pressure”, “I Don’t Live Here Anymore” o “Pain”.
“Live Drugs Again” da una excelente medida de lo que son y suponen en la actualidad The War On Drugs, tras materializar una evolución asombrosa desde su debut “Wagonwheel Blues” (Secretly Canadian, 08) hasta ese “I Don't Live Here Anymore” (Atlantic, 21) que hasta ahora es su último álbum de estudio. El documento muestra a una banda intachablemente compenetrada, en la que Granduciel se acompaña de David Hartley (bajo), Robbie Bennett (teclados), Charlie Hall (batería), Jon Natchez (saxo) y Anthony LaMarca (guitarra), así como por la nueva incorporación del grupo, Eliza Hardy Jones, en teclados y coros.
Cerca de noventa emocionantes minutos tejidos entre rock clásico (con la sombra de Springsteen siempre acechando) e indie-rock bien atusado, con frecuencia tendente a la épica. Grabado en la gira que tuvo lugar entre febrero de 2022 y diciembre de 2023 en localizaciones de Estados Unidos, Reino Unido, Europa y Australia, cabe admitir como trampa que las tomas provengan de diferentes actuaciones, pero no es menos cierto que el resultado es del todo convincente. Una referencia inexcusable para cualquier seguidor en firme de la formación norteamericana, pero que también resultará ser una excelente piedra de toque o toma de contacto inicial para aquellos neófitos que quieran iniciarse en la discografía de The War On Drugs.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.