Con su debut en 2008 Kitty, Daisy & Lewis le dieron un lavado de cara al rockabilly. Eran frescos y espontáneos, con lo que aquella irrupción hizo pensar que ese grupo en el que todos se intercambiaban instrumentos y cantaban gozosos algunas canciones propias y muchas ajenas, iba a ser sinónimo de una carrera ejemplar. Pero flaqueban sobre el escenario y eso frenó su acelerón. Siendo aún jóvenes y con tiempo por delante para mejorar, era preferible fijarse en lo que eran capaces de ofrecer en un estudio de grabación. Tres años más tarde con la edición de “Tomorrow” sucedió todo lo contrario. Se había evaporado esa clarividencia al grabar, dando como resultado un disco fallido. Había llegado el momento de apuntalar ciertas cosas y tomarse un respiro. Por esa razón, se han tomado cuatro años de tiempo hasta madurar su propuesta. De ahí que las canciones de “The Third” no engañen. Kitty Daisy & Lewis se muestras más serios, más sólidos y también más variados. Sirva como ejemplo el primer single, “Bye Bye Baby”, que combina respeto a la tradición y al mismo tiempo apunta su visión de futuro.
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