Inner Space/Outer Space (remixes)

Los de Blackpool saliron de las catacumbas de la primera hornada del post-punk con la publicación de su primer material en 26 años. En “Dark Matter/Dark Energy” (Cherry Red/15) abordaban con vigor cuestiones científico-filosóficas (el Big Bang, la materia oscura…), desde la tensión ruidista, conciliando la instrospección existencial del punk con las grandes cuestiones de la ciencia moderna. Aquella resurrección, fructífera contra todo pronóstico, despertó el interés de diversos y distinguidos colegas, que se lanzan ahora a remezclar, o incluso reinterpretar, sus canciones. Y aunque el minutaje impone (73 minutos) y la producción tiende a ser tan plomiza como la portada, hay bastante más chicha de la que podría esperarse.

James Dean Bradfield y sus Manic Street Preachers se llevan “The Universe Explodes Into a Billion Photons of Pure Light” a las proximidades del rock psicodélico de estadio, o sea, en dirección opuesta al arisco corte original. Es más versión que remezcla, porque hasta Bradfield se anima a cantar. Clint Mansell, especialista en bandas sonoras obsesivas, prefiere transportar el mismo tema a delicados terrenos orquestales. Funciona también lo que hace Mark Lanegan con “Dark Energy”, internándose en las simas electro-góticas que frecuenta estos días. El alemán Phillip Boa se lleva “Do The Supernova” a efectivos terrenos de electro-punk percutivo y Godflesh dislocan la robusta e industrial “21st Century Man”. “Space Junk” recibe doble tratamiento: El dub mutante abstracto de Reverend and The Makers y la amenaza latente de la excelente versión de Mark Stewart (The Pop Group), que califica su mezcla como la mejor que ha hecho nunca.

Hay momentos exóticos (los iraníes Barfak remezclan “Magic Eye (To See The Sky”) y de tensión enfermiza como el “Multiverse Theory” de los veteranos industriales In The Nursery o las guitarras atmosféricas del ex PIL Keith Levene con “Dark Matter”. También patinazos sonoros, con los norirlandeses Therapy? empantanándose en las ciénagas del rock sintético. Pero el conjunto, electrónica fantasmal e inquietantes tonos industriales mandando, se sostiene.