Fiel a su ideario de honestidad brutal, Mike Skinner ya no puede hablar de sus piques con la Play o de devolver tarde los DVD´s al videoclub de la esquina, el escenario de sus correrías ha cambiado y, con él, el de todo el disco ya desde la portada (ahora posa frente a un Rolls Royce en lugar de en la parada del autobús).
Pese a ser una estrella en Gran Bretaña le cuesta lo mismo ligar con otra celebridad y te lo cuenta en “When You Wasn´t Famous” con la misma naturalidad de siempre, pero hay algo, aquel delicioso gamberrismo, que se ha perdido. A la luz de este disco parece que Skinner está más interesado en demostrar sus skills frente al micro que en apabullarnos con sus producciones (¿dónde está la épica?), que quiere empezar a ser considerado un rapper en lugar de El Padrino del UK Garage. Aunque no puede hablarse de un disco fallido -hay mucha chica en la enorme “All Goes Out Of The Window”-, sí que se le han colado un par de despistes que nunca habríamos imaginado en un disco de The Streets. Tú vales más, Mike.
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