Desde la siempre efervescente Detroit y sin hacer gran ruido mediático, Soledad Brothers han acumulado en los últimos años méritos suficientes como para captar la atención del sector más inquieto del público rockero. “The Hardest Walk”, su quinto trabajo, supone un paso más en su particular retorno a las raíces musicales americanas, un viaje diferenciado por mantenerse fiel a un sonido entre crudo y garagero y por añadir un aire experimental en algunos pasajes.
Empleando esta fórmula, ya consolidaron con sus álbumes anteriores una apuesta singular que, ahora, además, han sabido enriquecer con más instrumentos y generosidad de matices. Y aunque, tras lo dicho, pueda parecer que esta formación peca de pretenciosa, sus aparentes ganas de complicarse la vida se acaban traduciendo, por el contrario, en un disco que abre con éxito nuevas rutas hacia la revisión de sonoridades añejas. Afortunadamente, pues, entre la proliferación de grupos que repiten esquemas sobadísimos y la alternativa ofrecida por insustanciales rupturistas que abogan por la desaparición del rock, existe una tercera opción válida, que además de original es respetuosa con el pasado.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.