The Chats son la penúltima sensación australiana: un trío de macarrillas sin pelos en la lengua que apuesta por lo de toda la vida con toda la gracia que puede tener a estas alturas. Se formaron en 2016, y tras un par de EPs, un LP, cambios de formación y un reguero de vídeos que les han granjeado un buen número de seguidores -incluyendo prestigiosas bandas de su país-, esperan consagrarse con este frenético segundo asalto.
El trío tiene como faro a los inmortales Ramones y sus muchas derivadas, Buzzcocks, AC/DC, el pub rock y bandas locales veteranas como Cosmic Psychos. En cuanto a su actitud, para no dejar dudas, ahí está su portada (los tres haciendo una peineta). El título de su web thechatslovebeer confirma que que aquí lo que prima es un desparrame juvenil que, las cosas como son, viene muy bien. Las canciones hablan de temas tan edificantes como cocerse en cada garito de Brisbane, la mafia local del surf, revisores, yonquis o escapar de la cárcel.
Trece cortes breves y directos en los que manda la velocidad descarada, y que, con un sonido natural, traducen fielmente lo que ofrece el engrasadísimo trío en directo. Imposible empezar mejor que encadenando la poderosa “6L GTR”, “Boggo Breakout” (un minutito y veinticinco segundos), el single “Struck By Lightning” y la espídica “Southport Superman” (34 segundos). La banda no afloja después, impartiendo un curso acelerado de punk rock sin complejos con cortes como “Panic Attack” o “Out On The Street”, con sus riffs demoledores. Incluso bajando el tempo (“The Price of Smokes”, “Emperor of The Beach”) o adoptando aires sesenteros (“Getting Better”) no pierden fuelle. ¡Misión cumplida!
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