Demasiados astros en el lugar propicio para que no surgiera de ello algo especial, aunque nunca se sabe. Como ya hiciera con el soberbio “I’m New Here” de Gil Scott-Heron, el CEO de XL Recordings, Richard Russell, produce a una de las mayores figuras de la música negra, Bobby Womack. En esta ocasión, cuenta con el ubicuo Damon Albarn a su lado, quien ya había contado anteriormente con la colaboración de Womack en Gorillaz, componiendo la mayoría de canciones del álbum, y la aparición de Lana Del Rey, para quien el aire clásico y decadente de “Gayglo Reflection” es como un segundo hogar. Pero a pesar del concurso de tantas manos externas, “The Bravest Man In The Universe” muestra las esencias de Womack de forma fiel, modificando levemente el continente para respetar el contenido, con un sonido claramente contemporáneo pero sostenido sobre unos planos que el de Cleveland contribuyó a trazar, algo que queda claro con la etérea “Whatever Happened To The Times”, compuesta por el mismo Womack junto a su viejo colaborador Jim Ford, que lejos de desentonar es uno de los mejores momentos de un álbum brillante, lujoso, profundamente humano.
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