Tras el buen presagio que fue su Ep de debut, “Grided Elephant” –de lo mejor del panorama nacional de 2004-, con “The Biggest Box”, Raydibaum (con ex Fromheadtotoe entre sus miembros) pasa a convertirse en una más que sólida realidad reafirmando sus posiciones entorno a ese emopop en eterna pugna por la perfección compositiva.
Una búsqueda mediante la cual huir de obviedades y lugares comunes y con la que el cuarteto enriquecer su lenguaje de estructuras complejas con un poderoso, a la vez que amplio, espectro de matices. Pop de orfebrería que repercute en temas pulcros, refinados y con ganas de trascender más allá de la inmediatez que, esta vez, les acercan un poco más hacia las periferias de Sunny Day Real Estate. Quizás se eche en falta algo de esa frescura con que se presentaron en su primera grabación (una carencia, si quieren, patente en la producción de los dos temas regrabados para la ocasión), pero su verdadera ansia por ser personales y forjar un nombre propio en esto del rock a costa de canciones mayúsculas nos regala algunos de los minutos musicales estatales más atractivos en lo que va de año, que no es moco de pavo.
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