Grabado al mismo tiempo que “Delirium Cordia”, pero reservado para ser publicado aparte, “Suspended Animation” contiene el apartado rockero que no incluyó el anterior disco de Buzz, Lombardo, Dunn y Patton.
Una cuarta entrega que, al contrario que su difícil y arriesgada anterior obra, todo un respiro en medio de una trayectoria fuertemente marcada por la urgencia rítmica y el ensamblaje musical bizarro, reitera esquemas y poco aporta ya al lenguaje que el cuarteto ha ido desarrollando en sus cuatro grabaciones en estudio hasta el momento. Tan sólo una leve proliferación de algunos espacios rítmicos les liberan de la repetición de ideas de su primer trabajo, unas maneras que luego entornarían genialmente a un emplazamiento más conceptual o a un ejercicio de vanguardia más radical y críptico. Porque si antes fue la innovación, ahora parece que prevalece más la demostración orgullosa de un ejercicio de estilo que, acentuado aún más por su acelerado despiece rítmico, precipita infinitamente la sensación de deja-vu. Una reincidencia innecesaria que, sin ser nada desdeñable, sitúa la capacidad de sorpresa (es decir, uno de sus primordiales valores) de esta avanzadilla a la más pura nada.
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