Summer Walker ha dejado ya de contar las heridas que le ha provocado el amor a lo largo de su vida. “Still Over It” presenta a la estrella abierta en canal y desangrándose sin poner ningún impedimento para que esto suceda. Su frágil personalidad y sus miedos le han llevado a generar una enorme dependencia al dolor y a buscar la protección en los demás. El fin de su relación sentimental con London On Da Track, productor además de “Over It” y parte de este disco; le ha obligado a aprender de los errores, a caer en un terrible pozo de oscuridad, sentir el cuerpo golpear en el suelo y volver a levantarse. “You think that I need you? Boy, you funny. Got my own money, so I'ma show you. You swear that I'll be lonely. Guess you don't know me, guess you don't know”, lanza en esa terapéutica “Unloyal” junto a Ari Lennox en busca del renacer. Los medios juzgaron su relación desde los inicios, en este 2021 remataron algo que estaba roto desde hace años e hicieron que ella se sintiera como la única persona que no era consciente de la enorme factura que le estaba pasando su unión a London. Aún así, esta etapa de su vida le ha regalado a su primera hija, le ha hecho más fuerte y ha sido un completo viaje de aprendizaje personal que jamás olvidará. Una búsqueda constante de la felicidad y la salvación que ha recopilado de manera excepcional en este segundo disco de estudio.
El álbum abre con “Bitter” y un claro mensaje de Cardi B en forma de spoken word en el que explica a Summer la importancia de capturar todas las emociones que está viviendo y plasmarlas en su arte. El valor de no juzgarse a una misma por haberse equivocado y cómo todo lo que ella está atravesando le recuerda a sus turbulentas aventuras con Offset (“Even though you have problems, put that drama in your music. 'Cause if bitches wanna get clout off you, you gonna get clout off them and you gonna put that shit in your music… Make them bitches feel hurt, hit them bitches where it hurt”). Apertura que, además, ya llega arañando a London comentando la supuesta infidelidad del productor hacia la artista. Una vez más, “Still Over It” se trata de una pieza creativa en el que prioriza la carga emocional, la intimidad, la sencillez y la belleza a la parafernalia y los excesos. Summer sigue construyendo su sonido sobre su pasión por el rnb noventero (“Dat Right There” con Pharrell Williams y The Neptunes) y recupera viejos sonidos que abandonó en su álbum debut, al inclinarse hacia beats algo más comerciales, en los que su lado más jazz brilla de nuevo (“Unloyal”). Eso sí, este segundo largo no es una pieza fácil de digerir y, además, sigue contaminado en gran parte por la producción de London On Da Track.
Cuando Summer conoció a London, esta le entregó todo su arte y su carrera musical pasó de ser introspectiva y minoritaria, a una búsqueda constante del éxito. La ambición de London convirtió a Summer en estrella comercial pero, a su vez, le generó una terrible dependencia creativa hacia el productor difícil de apartar. En este nuevo disco, la artista busca rodearse también de otras figuras en el terreno de la producción que amplíen su universo y es ahí donde aparecen Buddah Bless (Megan Thee Stallion, Migos) para la enorme “Ex For A Reason” o, por ejemplo, Chrishan (Chris Brown, Tinashe) quitándole peso a London en “Throw It Away”. Aún así, “Still Over It” es un álbum construido en gran parte cuando Summer y London seguían siendo pareja y el sello del productor sigue siendo enorme. Eso sí, es alucinante ver esas letras tan crudas, directas y llenas de dolor dirigidas hacia London por parte de la cantante y ver cómo también él firma la producción de los temas con total frialdad. Un auténtico ejercicio inhumano y autodestructivo que, por otro lado, refleja la forma más increíble que tiene la artista de soltarle todo lo que lleva escondido en su corazón. En “No Love”, por ejemplo, habla junto a SZA de cómo ha tenido que abrir los ojos y comprender todas las injusticias que ha permitido en su relación (“If I had you back, I wouldn't've did all that. I would've played it just how you wanted to play it. You didn't yet see my worth, so you try to play me. But I was so in love, love that I just got a little bit too complicated”). En “4th Baby Mama” le reprocha cómo se sintió abandonada durante todo el embarazo, lo doloroso que fue sentirse sola y no tener ayuda (“How could you make me spend my whole fucking pregnancy alone? And where was you at?”). Tema precedido, además, de un prelude maravilloso con la voz de Sean Garrett y la producción de 9th Wonder (Kendrick Lamar, Anderson .Paak, Destiny’s Child). Y, en “Toxic” resume junto a Lil Durk, con una fuerte carga sexual, todo el veneno que el productor le ha metido dentro y cómo sigue enganchada igualmente.
Porque, a pesar de todo, es increíble sentir durante todo el disco que en el momento en el que London vuelva a aparecer por la puerta Summer caerá tristemente en sus brazos de nuevo (“Switch A Nigga Out”). La adicción de la estrella es enorme y dejar tu droga favorita nunca fue fácil. La única esperanza que nos queda de que esto no suceda es ese mensaje como tema de cierre narrado por Ciara en el que le explica a Summer que el dolor termina desapareciendo y que ahí fuera está esperándole la persona que cuidará de ella como verdaderamente se merece. “Still Over It” ha logrado el #1 en Billboard 200 en su semana de debut y se ha convertido en el mayor debut en streaming de una artista de rnb femenina en la historia de US (antes este título lo tenía “Over It”, su álbum debut). Es evidente que sus historias llegan al gran público, conectan con su sufrimiento y, sobre todo, con su autenticidad. Y da gusto ver cómo Summer sigue usando la música para sanarse, admirando su valor terapéutico, y sigue colocando esto por encima de las ventas a pesar de su posición privilegiada en el mercado americano actual.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.