Over It

En menos de un año el crecimiento artístico de Summer Marjani Walker ha sido tan necesario como impresionante. En octubre del pasado año, la nueva estrella del rnb se daba a conocer con “Last Day Of Summer”, mixtape que mostraba a una introvertida artista con una tremenda capacidad para plasmar en sus canciones todo aquello que no nos dejaba ver de forma externa. Ahora, sin embargo, se ha agarrado a la barra de stripper para subirse a la tarima y ser la reina de la pista. “Over It” presenta así a una artista con una personalidad arrolladora, una seguridad envidiable, sensual y humana. Se acabó lo de recibir todos los golpes y quedarse de brazos cruzados. Walker ahora está lista para llevar el control de todo y encararse al mundo las veces que haga falta.

Últimamente nos obsesionamos cada vez más por la búsqueda de esa gran novedad que haga que el disco debut de un artista se convierta en algo brillante. Pues bien, en el caso de Summer Walker podríamos decir que eso más bien escasea. No es un álbum que se incline por la experimentación, lo que busca es encontrar una identidad sonora más cercana a lo clásico. Es así cómo Summer Walker ha sacado a la luz toda su pasión por el rnb de los 90’s para construir sobre él su mundo. “Over It” es una especie de diario en el que la estrella plasma sus historias sentimentales de una forma tan directa, sincera y clara que te enamora desde la primera escucha. Letras que se presentan en forma de catarsis para la artista, pero que huyen de la oscuridad del fin de una relación y arrojan esperanza. Más bien la idea de Walker es servir de inspiración y apoyo a todas esas mujeres que se hayan encontrado en el mismo lugar de ella alguna vez en la vida. Busca que el público se identifique con sus historias, y lo consigue.

Junto a ello, con su primer álbum de estudio se aleja de la inspiración jazzística de sus primeras creaciones y se acerca más al terreno del hip-hop. Con “Over It” no sólo profundiza en el rnb más alternativo que construyó con su anterior mixtape sino que también genera beats lo suficientemente comerciales como para conquistar las listas de éxitos. Es aquí donde entra London On Da Track, productor del álbum e interés amoroso de Summer en la actualidad (a él le dedica “Drunk Dialing… LODT”). London llena el álbum de bases pegadizas, sonidos más duros que contrarrestan la dulzura de su voz y una producción llena de arreglos que, tristemente, en algunas ocasiones tapan la brillantez de las creaciones de la artista. Summer Walker siempre ha sido una artista que ha llevado el control absoluto de sus creaciones. En una entrevista Arsenio Archer (productor de “Last Day Of Summer”) explicaba cómo la artista se metía sola en su estudio para grabar los temas y que solo cuando ella creía que estaban listos les dejaba entrar. Es más, en muchas ocasiones Summer ha explicado que ella se desahogaba entrando en el estudio, que rompía a llorar grabando los temas, que era una experiencia tremendamente personal. Sin embargo, parece ser que con la entrada de London On Da Track todo este individualismo a la hora de trabajar se ha convertido en cosa de dos. Y eso se nota realmente en el proyecto. Incluso da la sensación de que muchas de las canciones han adquirido una segunda vida al pasar por las manos de London.

Entre los temas a destacar del disco, habría que citar la inclusión de esa “Girls Need Love” junto a Drake que alcanzó el platino en US o el protagonismo de “Playing Games” en dos versiones diferentes (tema que lanzó este verano de forma previa al LP y que marcó el sonido de este primer largo). Pero, al margen de estas, si nos quedamos con un tema que brille por si solo ese sería el “I’ll Kill You” junto a Jhené Aiko con el que el álbum alcanza su momento de éxtasis (“If them bitches 'round you, better be blood”). En él, las dos afilan sus cuchillos y los lanzan sin miedo al supuesto interés amoroso que protagoniza la canción. Además, ambas figuras del rnb comparten inicios de carrera bastante semejantes e incluso se podría hablar de una tremenda similitud entre sus voces. Por otro lado, Summer también ha participado recientemente en el último remix que Jhené ha lanzado de “Triggered” junto a 21 Savage. Un tema con un el mismo espíritu de venganza que la canción de Walker. Y bueno, si seguimos por la línea de las colaboraciones no nos podemos olvidar de la presencia de Usher en el álbum. Ese “Come Thru” que incluye el mítico “You Make Me Wanna” del artista, con colaboración vocal incluida, se ha convertido en uno de los temas de mayor relevancia del LP. Reflejando a la perfección toda esa esencia noventera que transmite el álbum tanto a nivel sonoro como lírico. Y claro, también habría que destacar el uso del “Get It Together” de 702 que aparece como sampler en “Body” (el tema favorito de Walker) donde habla de las relaciones tóxicas y cómo muchas veces no queremos escapar de ellas aún sabiendo que nos dañan.

El secreto del éxito de “Over It” al fin y al cabo está en que es un álbum capaz de representar las relaciones amorosas del presente, cómo las vivimos, las sufrimos y todo lo que nos callamos. Summer Walker lo saca todo a la luz como una especie de manifiesto para que asumamos de una vez por todas que la perfección no existe, que hay que ser valientes y que todos nos equivocamos en esta vida. Con pocas semanas en el mercado ya ha conseguido posicionarse como el mayor debut de una artista rnb femenina en más de 10 años y ser, además, el álbum con mayores reproducciones en streaming durante su primera semana de una artista femenina de rnb de la historia. Y esto es solo el comienzo… “Cause you got potential, you got, you”.