Maitasunari pasioa
DiscosSu Ta Gar

Maitasunari pasioa

8 / 10
Urko Ansa — 23-01-2017
Empresa — Jo Ta Ke Ekoizpenak
Género — Heavy Metal

Directo al corazón. Su Ta Gar se la juega en su undécimo disco en estudio con una selección de medios tiempos, orgías electro-acústicas, pianos y alguna que otra balada heavy, y resultan victoriosos. Es, sencillamente, un trabajo sorprendente por su riqueza musical y por lo que tiene de novedoso.

Sí, esta vez se la han jugado saltando al terreno de las atmósferas sosegadas, las reflexiones introspectivas y, rizando el rizo, dedicándole el disco entero… ¡al amor! Los de Eibar le cantan al sentimiento más universal y a ratos se adentran, incluso, en el pop-rock. ¿Realmente lo hacen? La respuesta es afirmativa, aunque lo ejecuten a su manera, ya que la personalidad del grupo es lo suficientemente fuerte como para dejar su sello en todo lo que hacen. Cantan al amor, a la ausencia de él, al deseo, también al apego a la tierra, a la falta de un ser querido... pero también al amor por la pasión (como el título indica), o ¿por qué no? a la pasión por la pasión. Puedo entender la sorpresa de los seguidores, pero perderse este disco (y la consiguiente gira por teatros) sería un grandísimo error que algún día lamentarían.

No es que Su Ta Gar no haya hecho baladas. Para nada. Es más, en toda su carrera se han mostrado como grandes especialistas y casi cada disco contenía una o incluso dos. La sorpresa radica en que hayan apostado por un disco entero de medios tiempos. Así, la balada heavy “Bazoaz” nos da la bienvenida con esa apertura acústica seguida de una melodía muy marcada en la que destaca el tono sosegado y bajo de Aitor Gorosabel. Esta disposición le sienta estupendamente: aporta variedad y amplitud de registros al resultado final, y le hace triunfar en muchos momentos clave del trabajo. El tema crece y crece con la abrumadora naturalidad con la que nos tienen acostumbrados, viene el crescendo y las guitarras afiladas para mostrarnos “el otro yo” de Aitor con las cuerdas vocales a pleno rendimiento. “Erresistentziara kondenatuak” ahonda en el bajo tono vocal y las guitarras acústicas apoyadas por la emotiva letra. Después vienen los decibelios, la kaña y los coros, esto último algo habitual en esta grabación. “Eguna argitzean” es apasionante ya desde las primeras notas del piano de Aitor. Canta suavemente pero luego viene el solo de la guitarra eléctrica y las voces dobladas, rematada por una melodía arrebatadora, muy cercana al pop. Perfecta, impresionante y aún más con el final del piano.

“Nor naizen jakin” mantiene el listón con sus acústicas y el posterior alzamiento de voz de Aitor anticipando el clímax con sus guitarras chispeantes y la consiguiente vuelta al punto de partida. Una power ballad en toda regla. “Inoiz ez bezala” y “Zoramena” son otras dos joyas con elementos comunes como las ya mencionadas acústicas-eléctricas-melodías tirando un poco al pop convencional pero siempre dentro del esquema de Su Ta Gar, la primera con su solo de guitarra y sus voces dobladas y la segunda por el poderoso ritmo de la batería y también (de nuevo) por la dupla de voces. Y llegamos a la joya de la corona: “Bowiek, denborari”. Distinta, profunda, maravillosa. Partimos con acústica-voces dobladas-teclado sugerente-preciosa melodía y nos vemos ya envueltos en un viaje sonoro apasionante que, rematando la jugada, nos regala un crescendo con especial protagonismo para las teclas (¡voilá!) y, obviamente, la guitarra eléctrica, esta vez doblada en la mejor tradición Su Ta Gar/Judas/Maiden.

“Ezer pasiorik gabe” (“nada sin –la- pasión”) es una declaración de intenciones en toda regla, con su intro, su consiguiente progresión y arrebato vocal de Aitor en el minuto 4 con “Pasiorik ezean, zuzen heriotzera!” (“sin pasión, vamos directos hacia la muerte”). Impresionante tema, con su excelente solo de guitarra (eléctrica, por supuesto) y final guitarrero épico, digno del mejor stadium rock. “Amesten dugun mundua”, por su linealidad y previsibilidad, es quizás el único tema que “sobra” o más bien no llega a la excelencia de las demás. Pero “Sumendia sutan” alza el vuelo con su memorable solo central. “Erresistentziara kondenatuak II” es un excelente epílogo al disco más arriesgado de Su Ta Gar. Es, básicamente, una parte de “Erresistentziara kondenatuak” interpretada al piano por Aitor, que se arriesga desgañitándose en los tonos altos. Lo borda.

Estos son los Su Ta Gar de 2016/2017: Un grupo compacto, con ganas de experimentar y ofrecer un plus de calidad, que ya lleva 6 años con la misma formación (Aitor y Xabi a las guitarras, Galder a la batería e Igor –el último en incorporarse- al bajo) y que tiene muchísimas cosas que decir en un año, el 2017, en el que celebran su trigésimo aniversario. Ahí es nada.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.