Ànima

Uno puede pensar que tras casi cuarenta años creando música llega un punto en el que se te acaban las ideas o en el que quizás ya no tienes tanto interés en crear música. Pero grupos como Sopa de Cabra, estandartes del rock en catalán durante décadas, nos muestran que siempre hay algo que te inspira, algo que te mueve para volver a crear canciones.

Es por eso por lo que, tras cinco años de silencio discográfico, vuelven con “Ànima” (Promo Arts Music, 24), un trabajo de ocho composiciones, que no llega a la media hora, y donde enseñan que, a pesar de su dilatada experiencia, son capaces de abrirse a otros artistas y llegar a un consenso, sean del estilo que sean. El objetivo de este trabajo según los propios miembros del grupo ha sido buscar aquellos puntos de unión con los nueve artistas que los acompañan en todos y cada uno de los temas, en lugar de reflejar aquello que más les separa.

Y, lejos de ser todos ellos artistas consagrados, los Sopa han aunado una mezcla generacional en la que todos nos podemos sentir representados. Podemos encontrarnos temas con sonidos más nuevos, como “Que et vagi bé” junto a Triquell, una de las piezas más especiales del álbum, e incluso la inicial “Ànima animal” creada juntamente con Pol Batlle. Pero no todo son caras nuevas, los Sidonie se unen en esa fiesta del indie-rock catalán a la que han titulado “Hyde Park” y Santi Balmes une su voz y su letra a “Data Límit” para otorgarle a la canción esa aura tan suya.

Pero donde más contrasta la voz de Gerard Quintana es en las colaboraciones con voces femeninas, colocadas todas ellas juntas al final del álbum. “Temps de Sega” es la canción más emotiva y bonita de todo el LP, la cual interpretan junto a Beth que, además, los acompañará en toda la gira de presentación de este disco. Pero no se quedan atrás ni “Un altre temps” con Yolanda Sey, ni “L’amor no cau del Cel” con Anaïs Vila y Clara Peya. Es un cierre muy emotivo en el que va a ser muy difícil que uno no llegue a emocionarse en una de estas tres últimas composiciones.

Aunque es cierto que se trata de un trabajo con unos rpm más bajos que altos, hay una clara bajada de ritmo al llegar al cuarto tema que se va agrandando hasta que llega al final. Pero lo que no podemos dejar de mencionar es que presenta unas letras tan bien cuidadas y tan maduradas que logran conectar con el oyente a primera escucha.

Al final “Ànima” es un reflejo de lo que es, y ha sido siempre, el grupo de Girona: unos amantes de la música que no quieren dejar de crear y que se abren a explorar nuevos sonidos y servir de altavoz para nuevos artistas del panorama catalán. No sabremos si se tratará de su último disco, pero si ha sido así, qué gran viaje y qué forma de acabar, dándole el relevo a esa nueva hornada de talento.