UK GRIM

Ningún grupo ha documentado las miserias de la Inglaterra Tory como el dúo de Nottingham Sleaford Mods. Con una productividad a prueba de bombas, Jason Williamson y sus incendiarias diatribas más su compinche en las bases Andrew Fearn, se han plantado, como si tal cosa, en este duodécimo disco.

Su nuevo trabajo sigue la estela de “Spare Ribs” (Rough Trade, 21), uno de los más inspirados de su fecunda trayectoria, y les muestra con el colmillo tan retorcido como siempre. El single “UK GRIM” (que da título al álbum) les lleva a irresistibles terrenos de electrónica sucia malhumorada. No es de extrañar, teniendo en cuenta la ridícula trayectoria política del país de la fugaz Liz Truss, donde las élites políticas y económicas se ríen a carcajadas de una ciudadanía cada vez más abandonada a su suerte. Como en todos lados, en realidad.

En lo musical, Fearn apuesta por ahondar en la variedad -dentro de su minimalismo- que ha venido caracterizando de un tiempo a esta parte la propuesta del dúo. Así, bases de hip hop de la vieja escuela brillan en cortes como “D.I. Why” o la espléndida y final “Rhythms Of Class”, mientras que su fórmula se refina en “Force 10 From Navarone”, con la aparición estelar de Florence Shaw, la hierática vocalista de Dry Cleaning. Y se embrutece en la primaria “Tilldiper”, “Apart From You” o “Pit 2 Pit”. En ese registro de electro-punk cavernícola siguen siendo imbatibles.

Pero momentos irresistibles -el kraut electrónico de “On The Ground”, el pulso rítmico de “Smasj Each Other Up”- se alternan con experimentos lúdicos a medio hacer que no terminan de cuajar, como es el caso de “Right Wing Beast”. Williamson se muestra de nuevo mucho más cómodo rimando que tratando de cantar, y “So Trendy”, con la sorprendente participación de Perry Farrell y Dave Navarro, se queda un poco en tierra de nadie. A “UK GRIM” le habría venido de perlas deshacerse de un par de cortes para aumentar la pegada del conjunto. Dicho lo cual, hay aquí material de sobra para seguir confiando en el olfato casi infalible de los británicos.