Elsewhere

Dramáticos, estridentes y sin encanto. “Elsewhere” es un sobresfuerzo por parte de Set It Off de cabalgar en las modas actuales de la industria con un resultado completamente fallido. Un disco que recicla herramientas usadas previamente por el grupo y que les sumerge en un pop teatralizado completamente hueco. La sobreproducción del álbum te lleva a desconectar incluso de esa continua y obsesiva búsqueda para lograr generar ritmos pegadizos que alcancen a las masas. Y el resultado final es más bien un proyecto completamente invisible que está predestinado a caer en el olvido antes incluso de finalizar el año.

Los encargados de llevar a Set It Off a este juego sonoro insulso y asfixiante han sido Bruce Wiegner (Scotty Siren), Mike Green y Nico Shadi. Además, la idea del grupo de describir las inseguridades de la banda, y unas ganas increíbles de liberarse de todo lo que les supone estar a la altura en un mercado musical complejo, les ha llevado a sacar a luz unas carencias creativas que no habíamos descubierto antes. Serias limitaciones que, en especial, reflejan una falta de talento a la hora de construir buenas letras y capturar emociones (“Dangerous”). Poco podemos salvar en “Elsewhere”, y es que ese dance-pop con brillo glam que sacan a relucir en el proyecto de forma constante termina representando una identidad en el grupo tan artificial como un bote de purpurina. Y, a su vez, les presenta como una banda tristemente desfasada y de la que te da la sensación constantemente de que ya ha pasado su minuto de gloria.

Como decíamos antes, sí que hay un intento de mostrar la parte más personal de Set It Off en este disco. Ese lado más personal llega, por ejemplo, con “As Good As It Gets” siendo la única vez que sentimos un poco de humanidad y de autenticidad entre tanta frialdad. Junto a esta, poco más podemos destacar de la propuesta salvando quizás el trabajo de cuerdas de “Why Not Me” que hasta podemos llegar a disfrutar. Está claro que la intención de Set It Off pasaba por definir de una forma mucho más directa lo que son como grupo y, además, dejar bien claro que no tienen ningún reparo a la hora de afirmar que son perfectos para el consumo de todo tipo de públicos. La pena es que lo que “Elsewhere” representa más bien es una clara oportunidad perdida y un intento fallido de capturar la obsesión “dosmilera” de estos últimos años y subirse al carro de ese espíritu de pop rebelde que tan bien les puede venir a Set It Off.

La entrega final a la que nos enfrentamos es más bien un proyecto terriblemente empaquetado que se agota con una sola escucha y que se podría definir como uno de los discos con menos encanto de la primera mitad del 2022. A veces arriesgar puede jugar en tu contra. Pero lo peor de todo es cuando intentas jugar tus fichas desde el lado más seguro, evitando riesgo alguno, y termina siendo un auténtico desastre.