Chris

Ya sabemos de sobras lo que ha pasado en la vida de Ryan Adams los últimos años. En la prensa se podían leer expresiones como “desplome” o “caída a los infiernos”. Acusaciones de maltrato, abuso de poder y conducta sexual inapropiada de hasta siete mujeres, entre ellas su ex Mandy Moore, desataron el escándalo. Incluso acusaciones de acoso a una menor parecían acabar con su carrera. Que el FBI archivara este último caso por falta de pruebas no pareció importar demasiado. Adams estaba acabado y eso se demostró con el tibio, siendo suaves, recibimiento que tuvo su buen "Big Colors" (2021), predecesor de este "Chris". Un álbum que llega por sorpresa. Y es que servidor, aunque el de Jacksonville anunciara una trilogía iniciada con "Wednesdays" (2020) con el citado disco de 2019, no daba un duro por una continuación y apostaba porque Ryan había finiquitado su carrera, tal y como mostraban los numerosos conciertos cancelados, más allá del tema pandémico.

Ryan Adams arranca el álbum con “Take It Back”, springsteeniana, y la primera de sus dieciocho canciones, y uno se plantea si la languidez de muchas de sus últimas canciones ha quedado solo atrás de manera momentánea o será algo habitual en el disco. Confirmar la segunda opción es solo cuestión de tiempo. Y aunque Ryan se ha vuelto a pasar de frenada, y si hubiera dejado el álbum en once o doce temas la cosa funcionaría mucho mejor, ha publicado un disco notable, rockero y bastante optimista. De hecho, y ya que lo hemos citado, el aroma a Bruce Springsteen no solo asoma en “Take It Back”, sino también en temas como “Still A Cage” o “Moving Target”. 

No pierde tampoco la oportunidad de lucirse en temas más tersos y angustiosos como “Say What You Said”, que parece salida al principio ¡de "Nebraska"! Pero no solo de Bruce vive Adams aquí y aromas a Neil Young, también habituales, también tienen dosis de protagonismo aseguradas. Curiosamente “So Helpless” es la más cercana a ese terreno. Respecto al tema titular, hay quien duda si está dedicado a Chris Cornell o a Chris Feinstein, bajista de los Cardinals de Adams, que murió en 2009. Aunque la opción más probable es que esté dedicada al hermano de Ryan, sin más.

Buen disco, sin aspavientos, que nos hace tener esperanzas de recuperar al mejor Ryan Adams. De la producción ya hablamos otro día.