Cartas náuticas

El trepidante ritmo de batería con el que empieza a rodar este disco y el riff de guitarra que se suma a continuación hacen pensar que Rojo5 van a desplegar un rockin’ hardcore de manual, pero no exactamente. Lo de este trío de Toledo encaja mejor en el círculo del emocore, pero en el buen sentido del término: estructuras post-hardcore y desarrollos con altas dosis de emotividad.

Escucho las canciones de este “Cartas náuticas” y me vienen a la cabeza nombres del pasado musical de este país como Cordura, Nothink o El Agente Naranja y, también, otros más actuales como Catorce o Avida Dollars. No en vano Pablo Franco, de esta última banda que he nombrado, colabora con Rojo5 metiendo voces en “Alimento”, uno de los mejores cortes del segundo LP del trío castellano después del pandémico “Bestiario”.

Componiendo y sonando como un bloque sólido, Rojo5 firman ahora un álbum fantástico donde pequeños detalles como esas palmas en “Migas de pan” quedan geniales; además, la instrumental “Sirena II” no desentona para nada con el resto de composiciones y si alguien me dijera que es la nueva creación de los dioses Toundra me lo creería sin dudarlo.

Bajo el auspicio de The Braves Records, un sello ya de referencia en este país, y con el marchamo de calidad que supone grabar, mezclar y masterizar en los Ultramarinos de los hermanos García, a Rojo5 solo les faltaba elegir un color para acabar de rematar el precioso vinilo que han lanzado. ¿Imagináis de qué color se trata?