Risk To Exist

Maxïmo Park cometieron el pecado de debutar con un disco esplendoroso como fue “A Certain Trigger” (Warp, 05), arrasador compendio de indie con clara querencia new wave y post-punk que sitúo el listón muy alto para (casi) todo lo que vendría después. Tras tal despliegue de poder, Paul Smith y compañía despacharon alguna obra irregular como “Our Earthly Pleasures” (Warp, 07) o definitivamente menor como “Quicken The Heart” (Warp, 09), antes de firmar “Too Much Information” (Daylighting, 14) hace más de tres años, hasta ahora su última entrega y de paso el mejor álbum de combo desde el mencionado estreno.

De este modo y basadas en las virtudes de dicha obra, las perspectivas ante el sexto trabajo de estudio de los británicos lucían optimisitas, pero lo cierto es que “Risk To Exist” resulta en su mayor parte un disco inofensivo y anecdótico, con la banda acercándose a ese pop disfrazado de agresividad hooligan y carente de auténtico interés que tienden a facturan bandas como Kaiser Chiefs o The Pigeon Detectives. Sólo alguna pincelada concreta del tipo de “Get High (No, I Don't)” o la propia “Risk To Exist”, que da título al conjunto, aparecen más inspiradas y recuerdan en la lejanía lo que banda aportó en sus comienzos.

Es éste un disco plano y facilón, que ocasionalmente cuenta con teclados de aspecto ochentero adornando unas canciones de por sí ya demasiado cobardes, empeñadas en confiar toda su pegada a melodías evidentes e inocuas. Es el precio a pagar por la inclusión de cortes grises e incluso aburridos del tipo de “Work And Then Wait”, “What Equals Love?”, “The Reason I Am Here” o “Make What You Can”. Unas medianías que señalan que el esfuerzo puede haber sido mínimo, dando paso a un acomodamiento de lo más peligroso, sobre todo atendiendo al perfil que se le presume a la formación. Ése con el que destacaron enérgicamente dentro de la escena británica, hace ya más de una década y que, dadas las circunstancias, parece todavía más lejano en el tiempo.
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