Mientras andamos esperando ansiosamente el lanzamiento de su próximo disco junto a The Night Sweats, que llegará el 5 de noviembre bajo el título de “The Future”, Nathaniel Rateliff ha puesto a disposición de sus seguidores un disco grabado en directo en Red Rocks en 2020 (ojo que en 2017 hizo lo propio junto a su banda) en una serie de conciertos que, a causa de las limitaciones por la pandemia, tuvieron un aforo de ciento veinticinco personas en un lugar en el que caben nueve mil cuatrocientas. El músico decidió tirar adelante esos shows ante la imposibilidad de girar para presentar su último disco en solitario, el introspectivo “And It’s Still Alright”. A pesar del carácter pausado del mismo, en el escenario se reunieron hasta diez músicos para interpretar canciones de toda la carrera de Nathaniel que, eso sí, se centró en su parte más intimista.
Así, a lo largo de hora y veinte minutos y veinte canciones, se rescatan temas de discos como “In Memory Of Loss”, “Falling Faster Than You Can Run” y hasta el EP “Shroud”. Nathaniel se muestra cómodo en su papel y los arreglos de cuerdas le sientan de manera fantástica a piezas como “All Or Nothing”, que se contraponen al elegante trabajo de la banda en otros momentos como “Expecting To Lose” o “What A Drag” que recuperan ligeramente al cantante de soul que tanto nos gusta. Mención especial merece la versión del “There Is A War” de Leonard Cohen, para la que sube al escenario un Kevin Morby que muestra que también como intérprete está en uno de los momentos culminantes de su carrera. Ahora solo nos queda esperar que ese “The Future” que se publicará en pleno otoño cumpla todas las expectativas que tenemos depositadas en él. Con tanta calidad a cuestas, difícil será que no sea así. Eduardo Izquierdo
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