Saturno

En el último año y medio Rauw Alejandro ha protagonizado una profunda renovación del reggaeton a nivel mundial. A diferencia de lo que puede parecer para el oyente novato, su obra reciente está, quizá no por encima, pero sí varios pasos adelante de la de estrellas como Bad Bunny. Su álbum ‘VICE VERSA’ llegó en el momento justo con la propuesta adecuada, cargado de más una docena de hits, incluido ‘Todo de Ti’, el tema que mejor representó el cambio de tercio al que Rauw Alejandro se enfrentaba con torería y talento. De ese álbum histórico al fracaso creativo de ‘Trap Cake 2’ a pesar de las colaboraciones internacionales de primer nivel. La intrascendencia de dicho álbum, o mixtape, amén de su inexplicable existencia en una serie ganadora que había iniciado con ‘Afrodisíaco’ auguraba un posible final temprano de la flor de Rauw Alejandro, y hacía de ‘VICE VERSA’, por unos instantes al menos, el final de un camino, en lugar del inicio del siguiente.

Con el estreno de ‘SATURNO’, Rauw Alejandro recupera la inciativa y vuelve a firmar un trabajo memorable. No es ‘VICE VERSA’, claro, porque las obras maestras no suceden siempre, pero es un álbum valiente y atrevido, y lo más importante, perfectamente ejecutado, en el que apuesta por la electrónica, reconociéndola, y por lo tanto, por la dimensión que tiene como artista el de PR, materializándola, como la nueva tendencia musical global. Esto es de especial relevancia, porque significa aceptar ( y por lo tanto, por la dimensión que tiene como artista el de PR, materializar) que el reggaeton, los sonidos urbanos en general, incluso la potencia del la música de raíz latinoamericana, por primera vez en dos décadas, deja de ser suficiente en sí misma para trabajar al más alto nivel de originalidad, para mantenerse en lo alto de la ola. La fusión que plantea con la electrónica en ‘SATURNO’ Rauw Alejandro es perfecta: a veces apuesta por acelerar los bpms de los temas, y otras directamente por subirse a una producción de electrónica al uso, a la que solo sustituye el tipo de sonido, si acaso.

El trabajo de Rauw en este ‘SATURNO’ no implica abandonar el imaginario del reggaeton ni del urbano, esto hubiera sido un error garrafal. Al contrario, el éxito de canciones como ‘PUNTO 40', con un viejo conocido de los seguidores del género urbano desde hace más de diez años, demuestra que es capaz de hibridar con acierto su acervo con su futuro. ‘CAZADORES’ con Arcángel, que ya firmó una de las primeras incursiones del reggaeton en la electrónica, hace una década, con ‘Panamiur’ o ‘Se Me Pega’, es otro buen ejemplo.

’DIME QUIEN?????’ tiene ese aura de hit incontestable, de gran canción, que tenía ‘Todo de Ti’, sin ser ‘Todo de Ti’. Pero la gran canción del trabajo, la que mejor refleja la transformación que Rauw Alejandro está acometiendo con destreza, es ‘CORAZÓN DESPEINADO’, donde es capaz de aunar en un mismo tema el pop rock, la electrónica y el reggaeton a varios niveles. Una canción que, de tan excepcional, es muy difícil de clasificar, pero, de tan excepcional, muy fácil de disfrutar.

Rauw Alejandro vuelve a la primera plana con ‘SATURNO’, un trabajo casi impecable, solo manchado por la horrible elección de visualizers para las canciones, que además en España ha sido el centro de una pequeña polémica por una posible copia al grupo jerezano de rap alternativo Space Surimi. Una anécdota menor frente a un álbum de primer nivel, que continúa el camino que ya empezó a andar con ‘VICE VERSA’, o aún más, con ‘Afrodisíaco’, como ya comentábamos, logrando personalizar la evolución de un género del que otros ya están tomando nota con avidez, la misma con la que el público va a bailar y a calentarse con cada uno de los temas de ‘SATURNO’, que al final es la esencia de un género que si pasa airoso esta prueba de esfuerzo, se confirmará como uno de los grandes históricos.