La crisis sanitaria no ha sido un camino de rosas para ningún grupo de música (seguramente para nadie en general, pero no nos vayamos por las ramas). El caso es que Ratpenat también han tenido lo suyo. Decidieron sacar su segundo álbum (“50% Glam 50% Clavegueram”) en mayo de 2020, en pleno estado de alarma. Mientras lo presentaban dónde y cómo podían, fueron lanzando diversos singles entre “ataques tanto de la iglesia católica como de militantes de un feminismo mal entendido”, según aseguran en su nota de prensa. En estos dos últimos años muchas bandas han caído fruto de la inactividad y el desánimo, pero los barceloneses regresan con un tercer trabajo (aunque sea “tarde... y con resaca”) donde utilizan la fórmula de su ópera prima.
Es decir, una cara a integrada por canciones propias e inéditas, comenzando por “100% indecent” (titulada al igual que su primer disco), primer single con su correspondiente videoclip donde dejan claro que están dispuestos a seguir provocando y abogando por la libertad de expresión (“Vuestra moralidad, fruto de la mediocridad. Si te ofende mi cuerpo desnudo, el problema lo tienes tú”). Y terminando por “Tot no anirà bé”, single lanzado en otoño de 2020 y recuperado para la ocasión.
Y una cara b compuesta exclusivamente por versiones, esta vez de cantautores clásicos catalanes: Quico Pi de la Serra (“Si els fills de puta volessin no veuríem mai el sol”), Albert Pla (“La sequia”), Pere Tapias (“Era tan bon home”), Quimi Portet (“Tinc una bèstia dintre meu”) y Lluís Llach (“Que tinguem sort”). Llevadas obviamente a su terreno, donde mantienen su objetivo original de hacer rock en catalán sin limitaciones estilísticas: del punk rock al rock&roll pasando por el metal o el hardcore.
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