Durante primera década del Siglo XXI comenzó a despuntar un movimiento de revisionismo del cosmic-disco que contó con los productores Prins Thomas y Lindstrøm como puntales, aunque todo eso se fuese gestando unos cuantos años antes con artistas como Mental Overdrive o Skatebård. Este grupo de productores, noruegos en su mayoría, se dedicaron a quitar el polvo e inyectar músculo al estilo disco, mezclándolo con el italo, balearic e incluso con toques de house y kraut, con unos resultados tan buenos que les llevó a alcanzar cotas de popularidad insospechadas en sus inicios, ayudando a que formasen sus propias plataformas editoriales (Full Pupp, Smalltown Supersound, etc…) y a descubrir por el camino algunos otros clásicos actuales como el gran Todd Terje.
Más o menos una década después nos encontramos con el quinto disco de Prins Thomas, tiempo en el que le ha dado tiempo para mejorar como músico, evolucionar hacia terrenos más ambiento y/o experimentales -e incluso rockeros por momentos- y a volver (más o menos) de nuevo al punto de partida con este lanzamiento. Aquí se centra otra vez en esas influencias iniciales, pero aplicando todo el conocimiento, calidad y técnica acumulados a lo largo de los años.
Un trabajo en el que volvemos a deleitarnos con esas esas bases rítmicas llenas de groove y calidad y las melodías tan especiales que tan bien sabe destilar, como las de ese delicioso arranque con un "Here Comes The Band" orgánico y ascendente, lleno de detalles y de buen gusto; melodías que se desarrollan a través de temas que transitan por el cosmic y kraut-disco y el balearic ("Venter På Torske" y "Villajoyosa"), trazando una conexión entre sus inicios y esta época actual.
Unos temas que transmiten sentimientos de melancolía, como los que muestra en "Aske Hermansen", compuesto en medio de la gira, en uno de esos momentos en los que echaba en falta a su familia. Este quinto LP, que supone otro buen cimiento en su ya de por sí consolidada carrera, merece ser escuchado de principio a fin. A ser posible en un entorno agradable y paladeando tranquilamente un buen licor mientras uno se deja llevar por la excelente música que nos ha vuelto a ofrecer este gran músico y productor.
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