Supongo que llegados a este punto nadie dudará de la importancia de los estadounidenses Isis en la reformulación del metal y en el desarrollo, junto a Neurosis, de lo que hemos dado en llamar post-metal. Sus inquietudes no son las mismas que las de, por poner algunos ejemplos, Shadows Fall o Chimaira. Lo han demostrado en sus excepcionales trabajos en estudio, en sus abrasivos directos y, una vez más, en este proyecto de remezclas y disloques electrónicos.
Lo que inicialmente fueron dos Ep´s en vinilo de doce pulgadas se ha convertido en un doble compacto de canela fina. Artistas como Fennesz, Tim Hecker, Mike Patton, Venetian Snares, The Oktopus (Dälek) o el gabba Dj Speedranch echan mano de las composiciones de Aaron Turner y sus muchachos para dotarlas de un espíritu distinto. Y sepan que el resultado resulta ser bastante más apetitoso de lo que esperábamos. Thomas Köner dota a “Hym” de un ambiente crepitante; Mike Patton sorprende (que no convence) convirtiendo “Maritime” en una suerte de catarsis épica; Aaron Funk aprovecha al máximo las guitarras y los bajos para llevar a Isis a su terreno, al de la rítmica quebrada e irónica; Tim Hecker opta por el ambientalismo; Dj Speedranch cuela voces femeninas; The Oktopus juega con la oscuridad y Destructo Swarmbots agudizan la cara más malsana de Isis, convirtiéndoles en una banda sonora de lo más aterradora. Aunque, a modo de apuesta personal, voy a quedarme con la reinterpretación que de “The Other” hace James Plotkin, emplazando las partes vocales en un primer plano y exprimiendo al máximo todo el dramatismo del original.
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