Aunque siempre han estado ahí, lo cierto es que parece que las nuevas generaciones tienen cada vez más en cuenta a los artistas argentinos dentro de la escena urbana. Duki, Trueno, Wos o el productor Bizarrap son ejemplos de esto y en esta lista no podía faltar ella, Nicki Nicole, la nueva reina del pop argentino. La rosarina publica su segundo disco, “Parte de mí”, en un gran momento, tanto por el auge de la música argentina como por su propio éxito.
La intérprete ha concebido estas dieciséis composiciones como una historia de desamor y los múltiples puntos de vista por los que pasas dentro de esta. Desde ese inicio emocionante en “Parte de mí” donde se abre en canal hacía ese amor perdido hasta llegar a suplicarle directamente que vuelva en “Si vos me lo pedís”. Pero “LL (interludio)” es el punto de inflexión, en el que ella asume que no va a volver y del daño que ha recibido, un hecho que le hace empoderarse y dejarnos las pistas más crudas y directas de la referencia.
El disco es una clara representación de Nicki, una artista que no tiene miedo a adentrarse en cualquier género y explorarlo. De ahí que pueda asemejarse a la mítica “René” de Residente en la pista que abre el trabajo, como pasarse al reggae, gracias a su colaboración con Dread Mar I y a la base de Bizarrap, o sumergida en una especie de tango en “Perdido”, una de las joyas del trabajo. Aunque el género en el que mejor se mueve es ese que se encuentra a caballo entre el pop y el trap y que forma algunas de las mejores pistas del álbum como “Darling”, “Colocao” o “Baby”.
Estas son sus mejores cartas de presentación ya que a pesar de que es partícipe en múltiples colaboraciones por ser una apuesta segura gracias a su adaptabilidad, sus mejores pistas son en solitario. Aunque, evidentemente, incluye varios feats que desde ya van a reinar en las noches discotequeras. Los artistas urbanos Rauw Alejandro, Mora y Delaossa firman junto a ella las tres canciones más cercanas al reggaetón. Y a parte de unirse a estrellas urbanas, también ha dejado reflejado su sello en el resto de las colaboraciones.
Por un lado, destaca la relevancia de la mujer dentro de la industria, cosa que demuestra en la letra de casi todas las pistas en las que se empodera a ella misma, y también en las colaboraciones. Queda plasmado en “Tengo to”, el tema en el que participan tres estrellas emergentes, la española Ptazeta, la mexicana Snow The Product y la propia Nicole; y, a parte, su colaboración con Mon Laferte, “Pensamos”, una especie de rap en el que, sorprendentemente, ambas se acoplan muy bien. Y, por otro lado, destaca a los artistas de su patria. “Dangerous”, junto a Trueno y Bizarrap, es la representación del gran momento que pasa la escena urbana argentina. Sin olvidarse de Dread Mar-I y Tiago PZK.
En definitiva, un buen trabajo conceptual de desamor, en el que destaca su lucha por el feminismo y por la calidad de la música argentina; y se destapa como una auténtica estrella del pop, algo que ya se intuía en su primer disco hace ya tres años.
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