¿Un golpe de suerte? No. ¿Una casualidad? Tampoco. Más bien se trata de una simple cuestión de talento en estado puro.
Si Jon Spencer, Neko Case y Jim White les echaron el ojo, y en su disco en directo reunieron a luminarias como North Mississippi All Stars, los hermanos Robinson o RL Burnside, debe ser que algo tienen estos chicos. Tras el paréntesis de la banda sonora de “Tales Of The Rat Fink”, esperábamos ansiosos este nuevo disco, el sexto en su historial. El listón estaba por las nubes, pero “New Seasons” consigue igualar sobradamente su marca anterior. Si en el pasado instrumentalmente no había dudas, era en las voces donde surgían los interrogantes. Sin embargo, las cosas han mejorado en ese sentido, y los resultados son más que visibles. A sus habituales muestras de country fornido y psicodelia controlada, añaden ahora sonoridades propias de Ennio Morricone. “New Seasons” debería sonar en el salón de Al Swaringen de “Deadwood” a todas horas gracias a esas armonías de la escuela The Byrds, a esa profundidad taciturna, a la fina producción de Gary Louris (The Jayhawks) y a una elegancia que se les presuponía y que ahora muestran con la clase del que lleva puesto un frac nuevo de más de mil dólares. ¿Grande? Grande no, enorme.
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