El nuevo álbum de Muchachito Bombo Infierno se ha cocinado a fuego lento. Ya habíamos ido escuchando algunas de sus canciones en los distintos singles que ha ido lanzando desde 2021, en plena desescalada de la pandemia. Y dándole una vuelta al mantra de “Todo va a salir bien” de aquellos días extraños, al final ha llegado “Qué puede salir mal”, forjado en su propio estudio de grabación. Un lugar levantado a lo largo de un año con sus manos en el que fabricar canciones rodeado de los suyos. Y es que estamos ante un disco coral, lleno de vientos, percusiones y colaboraciones, pensado para tocar en directo con una gran banda. La rumba le deja también espacio al swing, el blues o el funk, fusionándose en el característico estilo que el propio Muchachito ha bautizado como “rumbaorleans”.
Tras la introducción de “Pase 1” (hay dos más, dividiendo así el trabajo en tres actos) llega “Pues no”, que ya presenta un swing alegre y bailongo cargado del optimismo que emana todo el disco. “El club del paro” la compuso para la banda sonora de la película homónima, inspirándose en los momentos de bar de barrio con los colegas de toda la vida: “A esta parroquia yo me vine a bautizar”. Con la colaboración de La Perra Blanco a la guitarra (que le da su toque bluesero) grabó la cabaretera “Los besos que tomé”, el homenaje a su querido y desaparecido Melón Maguilaz (Miguel Escolá Sanjuanes), su excompañero del grupo Trimelón.
Los vientos siguen con la bailonga “Ella bailó”, cerrando el primer pase con la cotidiana historia de desamor “Demasiada agua y no hay piscina” (que sirvió de cara B para el single de “El club del paro” en 2021). Tras el “Pase 2” el disco sigue adelante con “El bailarín nocturno”, toda una oda a las liadas nocturnas: “Ayer salí, solo como un bailarín nocturno, todo me daba igual, no paraba de reír, y llovía mucho”. La rumba catalana pura y dura llega con “Gitanitos y morenos”, la versión del otro homenajeado del álbum: Gato Pérez.
El “Pase 3” enfila la recta final con las dos únicas canciones que tienen bajo del disco (tocado por el propio Jairo): “Tus labios son”, single claro, un funk que llevaba veintitrés años en su repertorio y que nunca había grabado (contado para la ocasión con la guitarra solista de Sergi Estella); Cierra la encargada de dar título al disco, “Qué puede salir mal”, la canción más flamenca del álbum que nos recuerda que “con amor todo se lleva mejor” (y cuyo final, tal y como se nos advierte en la solapa, “no tiene fallo, es así”). Un trabajo lleno de vitalidad, historias de barrio y ritmos que harán bailar sin parar al respetable en los conciertos que se vienen.
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