Vértigo

La apuesta que los navarros Mosh lanzan con su nuevo disco, se aprecia sin demasiado esfuerzo. El afán de una banda joven, por pasar al siguiente nivel, conservando unas señas de identidad más que definidas, al tiempo que se añaden ganchos con los que hacer la propuesta más resultona. Un paso hacia delante en cualquier caso, que no se debe minusvalorar. Ya desde la espectacular portada que preside el redondo, Mosh dejan claro que no quieren pasar inadvertidos. Han contado con el genial diseñador catalán, Guillem Bosch, constatando desde el primer momento, su intención por jugar en la liga de los grandes. Un trabajo visual de los que hacen volverse dos veces, para comprobar, que es lo que hemos visto.

Una vez el trabajo comienza a girar, podemos percatar varias cosas que saltan a la vista. El gran sonido que han conseguido los productores Alex Cappa y Pablo Rousselon, haciendo que la banda  pegue un salto de gigante en lo que ha contundencia se refiere, y lo francamente estudiada que tienen su esquema de actuación. Metalcore con muchísimo Groove, aderezado con oportunos estribillos melódicos serán los que marquen la tónica constante de este poderoso LP.

El hecho de cantar en castellano siempre les ha otorgado un punto de originalidad a Mosh, y en este redondo tratan de potenciarlo con pasajes marcadamente entonables. Sin duda buscando la conexión con un público que saben que adora sentir lo que canta, además de vivir lo que grita. Es una fórmula que miles de grupos similares han utilizado antes, por lo que no se les puede adjudicar la originalidad, pero si la intencionalidad.

Alternando cortes repletos de riffs sesgados, con otros como “Dale Más” en los que la rabia Thrashcore asoma por la puerta, consiguen una buena selección para cualquier aficionado del género. Desde la velocidad cercana a S.A. de “Lo Que Quieres”, a la emotividad que podrían desplegar unos Hamlet en “Química”, este redondo va mostrando todas las caras que son capaces de dibujar estos navarros.

La impresión general es inequívocamente positiva, mostrando a una banda en franca proyección, tratando de sumar puntos dentro de un estilo que ya lleva demasiados años necesitando revulsivos con los que hacerse clásico. Puede que no vaya a ser este el trabajo que revolucione el género, pero sin duda será un punto y aparte para una ambiciosa banda sin vértigo alguno a luchar por el éxito.