Seguramente no hace falta recordarlo, pero por si acaso, sepan que Bob Dylan sigue y seguirá siendo fuente inagotable de noticias, debates y publicaciones de lo más diverso. Sin ir más lejos, acaba de llegar a las librerías un nuevo y mastodóntico libro (más de seiscientas páginas y nada menos que dos kilos de peso), que reúne numerosa y variada documentación procedente del Bob Dylan Centre (un centro de estudios y archivo dedicado a documentar y estudiar la obra del huraño cantautor de Minnesota). Además, acompañando a este tomo repleto de manuscritos, objetos varios y más de mil imágenes, se publica el disco recopilatorio que ahora nos ocupa, también llamado "Mixing Up The Medicine".
A diferencia del libro, el disco no tiene mucha historia tras de sí, más allá de reunir doce canciones de las más populares del repertorio de Dylan. Es este, de hecho, un recopilatorio puro y duro, sin remasterizaciones nuevas, tomas alternativas u otras golosinas que puedan captar la atención de quienes ya poseen estos archiconocidos temas en su colección particular. De ahí que lo puntuemos con un 7, cuando obviamente, si estuviéramos juzgando la calidad, trascendencia e influencia de estas composiciones, no cabría otra nota que un 10.
Por otra parte, es tarea imposible resumir una trayectoria tan longeva, brillante y dispar como la de Dylan en solo doce canciones, por lo que hay que tomarse este álbum como una simple aproximación a su carrera, sin más pretensión que la de acompañar la lectura del libro con composiciones tan icónicas como “Blowin’ in the Wind”, “Like A Rolling Stone”, “All Along The Watchtower”, “Hurricane” o “Knockin’ On Heaven’s Door”, entre otras.
Dicho todo esto, no escapa a nadie que muchos de los más incondicionales, auténticos compradores potenciales del libro, pasarán también por caja para llevarse el disco, simplemente porque lleva estampado el nombre de su ídolo en la portada. Aparte de ellos, tener agrupadas estas canciones en un disco puede atraer también a quienes a estas alturas del cuento todavía no las tienen en su discoteca. Es decir, lo que a priori a muchos nos puede parecer un lanzamiento innecesario, después de todo, acabará interesando tanto a fans recalcitrantes como a los novatos en la temática Dylan, lo cual no deja de ser una paradoja.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.