Oinatzak

Desde Azkoitia recibimos el primer álbum autoeditado de Mikel Iraeta, un joven y talentoso pianista con felices querencias electrónicas, que formó parte de bandas como Ro y Zeizel, debutó con "Isha EP" en 2019 y que, desde hace unos años, reside en Barcelona. Este "Oinatzak" contiene ocho temas en los que Iraeta disfruta y se gusta con la sinergia de sonidos clásicos y de vanguardia, teniendo como partida el sonido de las teclas blancas y negras. El aderezo electrónico –a base de bases percusivas minimalistas muy cuidadas- y de melodías -dulces y sintetizadas- que rayan en lo ambiental, lo elevan a una categoría diferente y, por ello, especial. Así es como en temas como las escapistas "Ez Dakigu Zer Ikusi Dugun" y "Erro Askeak" o la muy cinematográfica "Alderantziz" combina, con gusto y sapiencia, lo sensible del sonido del piano con texturas atmosféricas, facturadas con el fluir de sus manos sobre máquinas. En otros cortes, caso de "Oinatzak" su piano asume todo el protagonismo en un tono taciturno, cuasi marengo. Al igual que en "Joan Naiz" son los sintes los que campan a sus anchas en un bello pasaje -¿o es paisaje?- que parece haber sido compuesto para ser disfrutado en la intimidad de un gran atardecer interior. En definitiva, este "Onaitzak" supone un nuevo paso en la evolución de un interesante artista en el que convergen virtudes dispares que, en sinergia, suelen dar buenos resultados, como a la vista –y, sobre todo, escucha- está. Consigue algo que está a la altura de pocos, dejar huella con su música, ¿qué más se le puede pedir?