Sean Rowe, con una voz extraordinaria y deslumbrante debutó oficialmente en disco en 2007, pero no fue hasta que publicó “Magic” tres años más cuando llamó la atención de público y de, sobre todo, los medios. Como alumno aventajado de Tom Waits y similares, su registro oscuro y grave no pasó desapercibido. No tardó mucho en grabar otra obra que iba por el mismo camino, quizás un poco más lineal en su estructura, pero con “Madman” ha llegado el momento de romper con esa estrategia. Sean Rowe explica que se pasó gran parte del año pasado viajando por Estados Unidos tocando en casas de desconocidos, una manera de empaparse de las costumbres de gente ajena, escuchar música, beber cerveza y probar la comida típica del lugar. Eso le ha dado una visión más amplia y accesible para sus nuevas composiciones, que ahora suenan más digeribles desde el principio. La influencia del blues de R.L. Burnside en “Shine My Diamond Ring”, el soul de “Desiree” y las inflexiones vocales a lo Leonard Cohen en el resto del disco subrayan su nueva forma de acercarse a más público sin descuidar su propia esencia.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.