Tres años han pasado desde que Terroristars hicieran estallar su primera bomba, “Satanistars”, un debut casi tan impactante como su sangrienta imagen.
Un tiempo marcado por sus incendiarios directos, primero; por sus crecientes problemas internos, después, y por su posterior y repentina disgregación. Su actual retorno llega acompañado de un cambio radical en sus filas, aunque ello no ha implicado rebaja alguna de la agresividad y la mala hostia tanto musical como verbal que marcaban su antecesor. Una buena muestra de ello es la violenta “Martillo y Mártir”, donde Curtonates no deja títere con cabeza vociferando lindezas como “Soy apóstol del joder/a tu cabeza fornicaré; progresista y subnormal/conservador podrido estás; me follo a tu democracia/sois todos unas putas”. Claro y conciso. La parte instrumental no se queda atrás en virulencia. “Made In Hellspain” vuelve a mezclar thrash embrutecido y death metal (“Delamuerte”) con la vista puesta en bandas como Brujería, Fear Factory, Slipknot (“Muñecosis”) o Sepultura (“Orquesta fantasmal”). Todo ello salpicado de un cafre pero saludable sentido del humor, como dejan claro de entrada con estrofas en spanglish como “Toma Made In Hellspain/de puro TNT/frescor salvaje/sabor kamikaze/múltiple platino number one/putos amos de raza cabrona”. Tan locos como siempre. Que desfasen bien en sus conciertos; si a nadie se le ocurre cancelarlos, claro.
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