El “Little Red” de Katy B es un cuidadísimo encuentro entre el pop británico y el dance más brillante. Recoge toda la esencia, todo el talento, de esta pelirroja que irrumpió en la electrónica comercial con una propuesta envidiable. La espera de una secuela desde aquel rompedor “On A Mission”, hace ya tres años, se estaba haciendo eterna, pero viendo el resultado final ha merecido la pena.
El nuevo LP de Kathleen Brien se presenta como un gran salto hacia el lado más dance de la artista, sin abandonar las radiofórmulas que tanto gustan a los británicos. “Little Red” abre con un voraz “Next Thing” para dar paso a “5AM”, todo un regreso a los orígenes de Brien tanto a nivel sonoro como lírico. Rinse FM, Dj Geeneus, esta vez ha conseguido tener mucho más peso en el terreno de la producción y vuelve a firmar como compositor junto a Katy.
“Crying For No Reasons” es el ejemplo perfecto para definir la situación actual en la que se encuentra la relación de esta inseparable pareja. El pop comercial de clase alta, y alma funky, que han conseguido con el segundo single de “Little Red”, no hace más que demostrar que se pueden crear verdaderas joyas para las grandes masas.
De su “Danger”, el Ep lanzado en 2012, solo se ha salvado ese homenaje al neo-rnb que es “Aliyah” junto a Jessie Ware. La colaboración de Sampha en “Play” aparece para remarcar la habilidad vocal y fluidez de Katy. Por otro lado, el cierre de la edición deluxe con “Sky’s the Limit” no hace más que aumentar las ganas de liderar la pista de baile que tiene la artista. “Little Red” es su consagración, la madurez que B ha conseguido en estos últimos años, y a la vez una recopilación de éxitos atemporales para degustar sin prisa.
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