Ladyhawke

Lo de Phillipa Brown es pura devoción por los ochenta. Lo demuestra con ese encantador alias de Ladyhawke, título original de “Lady Halcón”, aquella entrañable película de aventuras de Richard Donner en la que aparecía una bellísima Michelle Pfeiffer, con el vídeo que pone imágenes a una de sus canciones más redondas, “Dusk Till Dawn”, plagado de referencias a las películas protagonizadas por Freddy Krueger y por Jason Voorhees, y con un disco como “Ladyhawke”, que funciona como un cuidado y un fresco rescate de los éxitos pop que más aparecieron en los primeros años de vida de la MTV. Kim Wilde, A Flock Of Seagulls, Real Life, Tears For Fears, las Go-Go’s más tardías, los Cars de “Heartbeat City”, algo de AOR inocentón y la sombra alargada de Stevie Nicks (la cantante de Fleetwood Mac mataría por tener una canción como “Back Of The Van”), son referencias que sirven para hacerse una idea de por donde van los tiros del debut de esta neozelandesa. Un primer esfuerzo que debe su solidez a la inestimable ayuda de Pascal Gabriel (Kylie Minogue, Sophie Ellis-Bextor, Debbie Harry, New Order, Erasure…), co-autor y productor de más de la mitad del disco. Y es que “Ladyhawke”, además de ser un placer culpable en toda regla, se erige como uno de los trabajos más adictivos de la temporada, uno de esos álbumes que vivirá meses en tu Ipod.