Más de cinco años han tenido que pasar para que los seguidores del grupo sevillano encuentren nuevo material en las tiendas tras su flamante debut, “Block Massacre”. Con sólo un disco, Dogma Crew ha obtenido los galones suficientes como para consolidarse en la escena mucho antes de que este nuevo material se haya publicado. Eso habla y mucho del caché y la actitud del grupo.
Bajo el apocalíptico nombre de “La octava plaga´”, los hispalenses nos muestran su excelente nivel. El reencuentro con el estudio de grabación nos trae un trabajo que continúa con la línea de su predecesor, pero que aporta esa dosis de madurez y evolución que se le exige a un grupo de su envergadura. Con un sonido más cuidado, firmado por nombres como los de Acción Sánchez, Rayden o Candela Clap entre otros, ese toque adulto se exhibe no sólo en las creaciones musicales, sino sobre todo en las letras, en las que se percibe el cambio y el proceso al que hacemos referencia. Algo más profundos y críticos con lo que les envuelve, no por ello abandonan sus señas de identidad, forjando de nuevo un concepto oscuro y crudo. Una mirada irreverente del mundo, pero al mismo tiempo humana, trasladando al oyente situaciones duras e historias reales que hablan del miedo, el pánico o la muerte. Pero también hay cabida para los textos del género, como el caso de “El orgullo del rapero”, en el que muestran su respeto por sus antecesores y piden que el resto haga lo mismo: el rap no se inventó ayer...
En cuanto a las colaboraciones, llama la atención especialmente el tema junto a Nach, “El francotirador”, en el que se demuestra que sus estilos dispares también pueden encajar a la perfección. Quince canciones sin desperdicio y cuya presentación es “Fuck The World", toda una declaración de intenciones.
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