La Maison De Mon Reve

El amor tierno que parece que se profesan las dos pseudo-monjas de la portada es ya una carcajada sardónica a costa de nuestra mirada. CocoRosie quieren hacer que traguemos como canciones dulces una colección de críticas furibundas contra todo lo que se mueve, especialmente la hipocresía relacionada con la religión judeo-cristiana, el racismo y el machismo.

El amor tierno que parece que se profesan las dos pseudo-monjas de la portada es ya una carcajada sardónica a costa de nuestra mirada. CocoRosie quieren hacer que traguemos como canciones dulces una colección de críticas furibundas contra todo lo que se mueve, especialmente la hipocresía relacionada con la religión judeo-cristiana, el racismo y el machismo. Son canciones folk compuestas y cantadas en París como podía hacerse hecho en el corazón de los Estados Unidos hace cincuenta años, sin embargo Coco y Rosie ya conocen a Michelle-Shocked, Beth Orton e incluso a Lou Barlow, y así les sale como les sale. Echan mano de pulseras, cafeteras, tarros de alubias o cubos de metal bajo la lluvia para pespuntear unas percusiones o unos samples enrarecidos, locos y sobre todo sorprendentemente efectivos para lo simples que son. ¿Nadie había reparado en este nuevo paso posible del lo-fi? No, ni son Marine Girls, ni Blixa Bargeld, ni Sleater-Kinney; son unas cronistas sonoras aventajadas de la realidad más cercana y unas letristas mordaces, que vale la pena consultar de vez en cuando para creer que aún hay otra manera de envasar el esperpento de la vida cotidiana que vivimos día a día sin escandalizarnos.