Uno de los momentos más dulces del pop en este 2023 ha sido el merecido exitazo de “Padam Padam”: porque la canción era el mejor lead single de Kylie Minogue en más de una década (dos décadas si no existiese “All the lovers”), porque la australiana es tremenda curranta y, sobre todo, porque es -perdonadme pero la ocasión lo merece- una puta hazaña que una mujer de más de 50 años (o más de 40) consiga tal hit, y consiga, digámoslo también, conquistar al público al que, si le preguntas quién es Kylie, no piensan en Minogue sino en Jenner.
Ya solo por eso, “Tension” iba a tener un hueco especial en la discografía de Kylie Minogue, pero es que la intérprete de “Slow” no se conformaba con un magnífico primer single y un resto de disco mediocre: el segundo, “Tension”, era igual de bueno o incluso mejor que “Padam Padam”, y el disco trae una tercera igual de buena, “Story”, el mejor cierre de álbum desde el que tuvo “Light Years” con la canción homónima, y una mezcla de hedonismo y vulnerabilidad que a Kylie le sienta como un guante.
Para la producción, Minogue repite en este disco con Cutfather, Daniel Davidsen, Duck Blackwell, Jon Green, PhD, Richard “Biff” Stannard, Sky Adams y Carl Ryden (con este último había trabajado en eras anteriores pero sin que sus temas pasaran el corte), e incorpora a Jackson Foote (que ha trabajado con Jennifer Lopez o Zara Larsson), LOSTBOY (Kehlani, Sabrina Carpenter), Kasper Larsen (Fleur East, The Wanted), y por supuesto Oliver Heldens, pues ese “10 out of 102" está incluido aquí.
Con todos ellos, Kylie elabora el trío de ases de “Padam Padam”, “Tension” y “Story” (junto al disparo de bpm de “10 out of 10”), pero de temazos no anda corta la cosa: “Vegas High” es una absoluta fiesta, “Hands” podría, sí, haber sido uno de los cortes de la BSO de “Barbie”, “Hold On To Now” funciona tan bien que no nos importa que fusile “Somebody” de Dagny (bueno, un poco sí, ¡justicia para Dagny!), y tanto “Things We Do For Love” como “You Still Get Me High” son divertidísimas, haciéndonos esta última soñar con una colaboración entre Kylie y Carly Rae Jepsen (si mezclarse con Tove Lo funcionó, esto es jugar sobre seguro), como ocurrirá luego también con “Somebody to love”.
Pero, aunque no hay canciones malas en “Tension”, sí hay unas cuantas que lo alejan de ser un álbum redondo. “One More Time” es simpática, pero mucho mejor en su estribillo que en sus estrofas, y nos lleva a preguntarnos qué le ha dado a Kylie con titular temas como canciones míticas, como aquí la de Daft Punk, una “Green Light” desde luego menos memorable que la de Lorde, y “Somebody to Love”, quizás la mejor de este trío, y, de hecho, la mejor de los bonus tracks (entre ella y la orgiástica “Love Train” dejan sin muchas opciones a “Just Imagine”). En cualquier caso, aunque “Tension” no llega a ser un top 5 de los mejores álbumes de Kylie (“Fever”, “Aphrodite”, “Light Years”, “Impossible Princess” y “X”), se queda muuuy cerca, un paso por delante de “DISCO”, y mucho más arriba que “Golden” y “Kiss Me Once”.
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