Hay quien dice que los seguidores de Sigur Rós nos hemos convertido en una suerte de secta en la que el fanatismo se equipara casi a la fe. Y uno, en momentos de flaqueza y dudas inexplicables, podría pensar que algo de cierto hay en tal aseveración, pero... claro, es escuchar el inicio de “Kveikur”, con “Brennisteinn”, “Hrafntinna” e “Isjaki” y darse cuenta que no, que no es fe religiosa, que no es fanatismo ciego, sino que Sigur Rós son un grupo excelente, una banda que, en unas ocasiones, diría uno que tiene el sonido y, en otras, las canciones. “Valtari” , su anterior trabajo tuvo el sonido, “Kveikur” cuenta con las canciones, algunas fantásticas como la ya citada “Isjaki” o la que da título al disco. El resto ya lo sabrán, un miembro menos, un sonido más duro y menos paisajístico, colores negros donde antes había blancos, y piezas que no resulta tan fácil identificar cuando suenan seguidas una tras otra en sus conciertos. Y magia, no se olviden, magia. Algunos creeremos en ella, otros no, pero ahí está, para los oídos que quieran descubrirla. Diablos, al final sí que estoy hablando de fe.
Curiosa reseña, uno que se bajo del barco (nunca mejor dicho) y que ahora tras la inigualable gira y este nuevo Kveikur, que es un "¡zas en toda la boca!" para él y otros muchos, se quiere volver a subir, sin reconocer errores, marchano a Úbeda para disimular
Muy buena crítica, es un buen disco con 9 canciones excelentes aunque le falta ese ''algo'' de Sigur Rós que nos envolvía en ese ambiente de paz.
me referia a "lo que he escrito sobre Sigur Rós"... soy un gran gran fan del grupo... Eso sí, si la palabra fanático significa tragarse todo lo que haga un grupo aunque no te guste, pues entonces sí que me bajo de tu barco, no del barco de Sigur Rós 🙂
Anónimo 1: Joder, como si ser fanático y no dudar fuera algo bueno. La próxima vez que quieras convertir en virtud uno de los peores rasgos de los humanos respira hondo y cuenta hasta tres.
el sonido perfecto.
Sr. Joan, por supuesto que le he leído l, es más le debo el descubrimiento de este grupo, algo por lo que le estará eternamente agradecido, pero la reseña da la sensación de no reconocer que usted sí dudo del grupo (y solo por Valtari)basta leer como comenzaba su reseña sobre el concierto de Febrero
Y por supuesto no quería decir que dudar no fuera bueno, solo que me llama la atención el no querer reconocer que se duda, a veces con demasiada facilidadtlyl has
Anonimo 1. Pero yo lo de que dudo lo he dicho muchas veces... por eso cambio tantas veces de rollo, jeje, pero es que precisamente con Sigur Rós no es un grupo que haya dudado tanto... me refería de cara a sus directos, que verles tanto me hacía perder excitación..
Anonimo 1. Pero yo lo de que dudo lo he dicho muchas veces... por eso cambio tantas veces de rollo, jeje, pero es que precisamente con Sigur Rós no es un grupo que haya dudado tanto... me refería de cara a sus directos, que verles tanto me hacía perder excitación..
Ah, y muchas gracias por participar y dar tu opinión, que es algo que mola que la gente haga, aunque sea para meterte conmigo un poquillo, jeje 🙂
Lo siento. Por más que lo intento, no puedo con Sigur Ros. Seguiré intentándolo.
Gran disco de Sigur Rós, perfecto después de sacar un disco tan tranquilo como Valtari (cabe decir que es un álbum buenísimo), el mejor tema sin duda es "Ísjaki"
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