“Antes de Conocerte (Parte I: Premonición)”

Juicy BAE oye algo que no ve, y ve cosas que no han pasado aún — esta es la premisa de “Antes de Conocerte”, el segundo álbum de estudio de la rapera sevillana, un proyecto representativo tanto de su crecimiento artístico como personal, y cuyo enfoque conceptual y mezcla de texturas la cimientan como nombre a considerar en la escena urbana nacional más allá de colaboraciones y hits.

No es la primera vez que Juicy BAE juega con estas ideas: en su primer largo, “PTSD”, ya se dibuja cierta narratividad (en su descripción de una relación tortuosa) y el deseo de insertar sus raíces flamencas de manera explícita. En “Antes de Conocerte”, sin embargo, estas intenciones se manifiestan más claramente: desde las portadas conectadas de los sencillos y el álbum (firmadas por el artista Charlie Smits) al paréntesis que acompaña el título, este disco gira en torno a la superstición y a las fuerzas que dirigen nuestras vidas, sin que podamos hacer más que detenernos a observarlas o construir una ilusión de control al tratar de predecirlas. En concreto, la “Premonición” que explica en primera persona “Antes de Conocerte” es la de una sanación romántica, el proceso de recuperar la fe en el amor tras una experiencia devastadora, y se delinea tanto desde el presagio (“Cuando el Río Suena Agua Lleva” o “11/11”) como desde el epicentro de la devoción (“DAMN” o “SOLOS”). De esta manera, actúa como secuela y extensión de aquellas propuestas que Juicy empezó a trazar junto al productor PMP en su anterior largo: no solo textualmente, dado que “Antes de Conocerte” contiene una evidente evolución lírica para la artista, sino también en cuanto a sonido, ya que el proyecto abraza todo tipo de fórmulas, desde un tímido flamenco vanguardista a un reggaeton tradicional, pasando por R&B contemporáneo, pop urbano y, por supuesto, trap. Juicy BAE se desliza con facilidad a través de todos estos estilos y retiene su frescura y capacidad para las melodías, además de seguir desprendiendo bravuconería incluso cuando el contexto es uno de vulnerabilidad.

Más allá de estas actualizaciones, en "Antes de Conocerte" brota un carácter con el que ya estamos familiarizados, que es el que hace destacar temas como "PLUTO BAE" y "YEAHx12 / Bubbaloo" — pistas convencionales de trap que, a pesar de funcionar, recuperan el manido imaginario del género y provocan una sensación de retroceso. También chocan de forma algo brusca con el resto de tonos del largo, que a menudo se sobreponen en lugar de fluir de unos a otros.

Es probable que lo que haga que el experimento de hibridación se resienta sea la condensada duración del proyecto: con 9 canciones y apenas 25 minutos, en el momento en el que "Antes de Conocerte" termina y vuelve a comenzar, uno siente que es un álbum amputado, empequeñecido, al que se ha privado de la oportunidad de crecer y ver exactamente cómo los matrimonios entre las diferentes influencias pueden seguir desarrollándose y deformándose.

A juzgar por el subtítulo del disco, nadie es más consciente de ello que la propia Juicy BAE. Si lo que sugiere ese "Parte I" en letra pequeña es correcto, solo queda esperar que la continuación de "Antes de Conocerte" esté menos restringida tanto espacial como conceptualmente para explorar en plena medida aquello de lo que la artista es capaz.