Hay discos que parecen haber sido creados para curar un poco el alma. Este es el caso de “Pagodes”, el tercer disco de estudio de Jono McCleery, cantante y compositor británico de profunda voz a lo James Blake. Cuatro años han pasado desde su anterior trabajo, cosa que denota la calma con la que McCleery ha querido afrontarse a este disco, sin acelerar el proceso y prestando atención a cada detalle.
El resultado demuestra que el tiempo dedicado a valido la pena: con este álbum el de Rotterdam alcanza su madurez compositiva y firma su obra más rotunda. Su expresiva voz de clásico cantautor consigue melodías más allá del folk, consiguiendo canciones que abrazan el minimalismo, utilizan la electrónica, se acercan al jazz e incluso coquetean con la bossa nova.
Guitarras acústicas, pianos, instrumentos de cuerdas y algún toque electrónico muy bien escogido (escúchese “Age Of Self”, cover de Robert Wyatt) son los elementos encargados de dar vida a un universo acústico de texturas sonoras, y una dulzura poética que nos acaricia las entrañas mientras nos susurra “todo va bien”.
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