Hagámoslo

Quien temiera que nuestro querido y respetado Johnny Cifuentes, al debutar ahora en solitario como Johnny Burning, pretendía desmarcarse de las señas de identidad del grupo de su vida, o liberarse para explorar nuevos sonidos o referentes, puede ir quitándose esa idea de la cabeza. Es más, el mensaje contenido en este Hagámoslo parece decir que, vaya a donde vaya, use el nombre que use, esté con quien esté, Johnny y su rock and roll serán siempre una unidad indivisible.

Y nosotros lo celebramos, porque da la sensación de que este cambio de contexto aporta unas energías renovadas, que unidas al básico e imperecedero estilo Burning, da como resultado una excelente colección de temas, más que apta para sumarse al legado de la banda madrileña desde el minuto cero. También en futuros directos.

Riffs y saxos con sabor stoniano (como en “El diablo en el hoyo”), medios tiempos cargados de actitud y emoción (“Tal vez seas tú”), contagiosos ritmos cercanos al boogie (“Un duro invierno”), unas gotas de R&B y otras de soul (“Adicción”)… Estamos, en definitiva, ante un encomiable recorrido por unos parámetros que nos resultan tan conocidos como reconfortantes. Todo ello, además, con unos bellos arreglos, un sonido perfectamente compactado y una portada sobria pero elocuente, en la que luce en relieve la palabra Burning como apellido circunstancial de nuestro hombre, advirtiendo de alguna manera que esto no es ninguna disrupción en su línea vital.

Por otra parte, entre sus cómplices en este nuevo atraco, destacan Mike Slingluff (Maikol) liderando la sección de metales, además del guitarrista Nico Álvarez. Este último, para más inri, es autor de la música de “Alma negra”, un resultón tema al que Johnny pone letra en primera persona confesando: “yo era un chaval, colgado en una cuneta, soñando con poder hacer canciones de alma negra”. Sus canciones puede que no tengan alma negra, al menos en el sentido literal, pero unos cuantos sueños está claro que ha visto cumplidos ese chaval. Sospechamos que este disco es uno de ellos. Confiemos en que no sea el último.