Auténticos artesanos de la música. Al margen de disfraces, locuras y adicciones electro; Hidrogenesse llevan años demostrando ser unos enormes genios creativos que manosean su arte como verdaderos herederos de la tradición. Respetan la música, valoran el poder que tiene más allá del consumo “fast-food” habitual que se ha generado en la sociedad actual. Y, evidentemente, un ejemplo perfecto de ello es el estupendo lanzamiento que es “Jo Jo Bo Bo”. Un álbum construido para darle una segunda vida, una nueva oportunidad, a aquel “Joterías Bobas” del 2019. Disco que regenera, reconstruye, inventa, remezcla e innova sobre todas esas canciones para transformarlas en piezas casi inéditas. Un proyecto al que, pese a la repetición, han logrado dotar de un alma propia. Una nueva pieza dentro de la serie como esos cuadros de Mondrian continuistas, y a la vez igual de fascinantes, que se alargan hasta el infinito.
“Jo Jo Bo Bo” es un juego complejo que habla de las segundas oportunidades. De que no existe solo una buena gran opción. De ahí que Hidrogenesse no sientan este álbum como un disco de remixes y descartes al uso sino más bien como un nuevo trabajo con el mismo valor que cualquier otro lanzamiento dentro de su carrera. En esta nueva entrega se muestran más libres que nunca abandonando coordenadas pop impuestas habitualmente en sus proyectos. Inician el álbum con esa “La Cita” que crece en complejidad conforme avanza la canción presentando una mezcla de orquesta, espíritu disco y alma sesentera. Y que, además, recuperan como cierre del álbum en forma de pieza instrumental para sacarle más brillo al trabajo sinfónico junto a ciertos sonidos de trovador que tan bien les va a Hidrogenesse y que repiten en varias ocasiones a lo largo del disco. Mantienen el aire latino que desarrollaron en“Joterías Bobas” potenciando así la parte más tropical del universo del grupo. Pero también se envuelven en la electrónica más ambiental de una forma mucho más plástica construyendo texturas que nos desplazan a localizaciones exactas en nuestra mente o incluso nos hacen navegar con una sola luz que nos guía (“En barca bajo las estrellas”). Entre las colaboraciones de lujo, al margen de los guiños derivados del álbum previo, esa participación de JARV IS tras el remix de “Brujerías jotas”.
Con este disco, Hidrogenesse desplazan a un segundo lugar el valor de la lírica para dar peso al instrumental. Muchos temas carecen de parte vocal y en otros la incorporan como un simple apoyo, como si de un instrumento más se tratara. Dan prioridad a determinados arreglos en las canciones que no los tenían tanto en su primera vida y generan una apuesta que provoca en cierto modo una sensación de improvisación continua dentro del álbum. Como si verdaderamente ninguna de las piezas finales que nos presentan estuvieran verdaderamente acabadas. Algo que, por otro lado, no sería tan raro teniendo en cuenta la idea central del proyecto. Un artista debe ser libre a la hora de crear o destruir su arte siempre que lo desee. Un artista debe ser el verdadero dueño de su obra. “Jo Jo Bo Bo” tiene ese espíritu de auténtico disfrute creativo y ese tipo de fiestas nos encantan.
Álex Jerez
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