Heathen

Ya tenemos de vuelta al artista camaleónico por excelencia. Tratándose de él, hay que preguntarse ante todo cuál será el color que habrán adoptado sus escamas en su enésimo cambio. Pues bien, la presencia a los controles de Tony Visconti, su productor en los setenta, delata un intento de volver al sonido que marcó su cumbre creativa, y, si recordamos los discutibles cambios de orientación del duque blanco en las últimas dos décadas, hay que alegrarse de que así sea, sin duda. Eso sí, que nadie se confunda, porque de ahí a equiparar “Heathen” con sus obras maestras va un abismo. “Slow Burn” es un single vigoroso que evoca al inmortal “Heroes”, con la guitarra de Pete Townshend aportando el toque más rockero del disco (a pesar de que haya participado vía e-mail [?]). Dave Grohl también ha colaborado, las versiones de Pixies y Neil Young no están nada mal y algún que otro tema incluso llega a brillar, pero Bowie no se ha librado de cierta frialdad heredada de sus antiguos escarceos con la electrónica. Vamos, que ha recuperado el rumbo pero no ha llegado a buen puerto todavía. Con todo, Bowie sólo hay uno y siempre es grato reencontrarse con él.