Too Loyal For My Own Good

Mientras “EDNA”, su largo de debut, sobrevive como puede para llegar a la próxima gira de Headie. El MC se saca de la manga una nueva mixtape que define a la perfección su posición en el mercado y cómo, tras la desinflada acogida de su largo, sigue priorizando sus valores y su gente por encima de la fama (“I’m industry but I’m still in the street”). “Too Loyal For My Own Good” es lo mejor que ha hecho One hasta la fecha. Una apuesta por el sonido clásico del actual rey del drill británico y, a su vez, una apertura hacia nuevos discursos sobre la versatilidad del artista y lo que puede llegar a entregarnos en el futuro. Una pieza llena de humanidad, lealtad, corazón y una firme sentencia que deja clara la notoriedad que ha ganado y su crecimiento en el mercado británico actual. El arma perfecta para sobrevivir frente a todos esos disparos que te pega la industria, sin darte cuenta, en el momento en que entras en el juego. El impulso que necesitaba para seguir navegando con fuerza sobre toda esa ola de hype que se generó alrededor de él hace un par de años.

“Countin’ this money aint’ bringin’ me peace. Same way countin’ this money, make me feel relieved”, lanza en “PTSD”. La popularidad de Headie One en su país es innegable, su nombre suena por todos lados como uno de los grandes de la escena y como el único que ha sabido conservar su esencia y no venderse a las masas. Toda esta explosión de fama (hasta ha sacado su propia colección de ropa y su propio perfume) descoloca aún a un artista que está más acostumbrado a la lucha por la supervivencia, que a ser un primera línea (“This fame ain’t nothin’ to me, I already had fame with my fiends”). Aunque evidentemente, como él mismo explica, esto también le sitúa en una posición de privilegio que no piensa desaprovechar y que está usando para generar ganancias con las que pueda proteger a los suyos. Y es que, para One su gente está por encima de cualquier montón de dinero que le puedan colocar en la cara. En especial, los OFB (Original Farm Boys), la banda callejera de Tottenham a la que pertenece y por la que más de una vez ha podido dejarse la vida. Solo hay que escuchar “Nothing To Me” y ese guiño a las consecuencias de la escenita que tuvo con Tion Wayne, otra de las figuras del rap actual británico que pertenece a los 3x3 (banda callejera de Edmonton y rivales de los OFB). Cuando coincidieron en un avión de vuelta de Dubai y el vídeo de la pelea acabó llenando toda la prensa en UK (“That boy can’t be an opp, he ain’t nothin’ to me. Yo, he said he ain’t wantin’ to beef. You was a good citizen and a civilian").

“Too Loyal For My Own Good” vive mucho del boom bap, pero también saca lo mejor de todo el crecimiento a través del drill que ha tenido One desde que se coló en la industria (“Beggars Can’t Be Choosers”). Coloca sus raíces sobre todas esas referencias de finales de los ochenta y, a su vez, seduce su presente con unos ritmos afrobeat mucho más cálidos a los que no nos tiene tan acostumbrados. Un ejemplo de ello es esa unión a JAE5 (Burna Boy, J Hus) para la producción de “Finer Things” y ese enlace con el corte más upbeat de la mixtape que es “Louis Vuitton Collar”. Porque, aunque se trata del primer lanzamiento de Headie One sin colaboraciones, sí que tiene un reparto de productores de lujo que hacen brillar la propuesta como se merece. Payday (6ix9ine, Megan Thee Stallion) genera un adictivo pulso alrededor de “Love Me For Me?” convirtiéndolo en uno de los mejores temas del proyecto. “Nothing To Me” tiene detrás a Benjamin Lasnier, productor danés tras el último lanzamiento de DaBaby junto a Lil Wayne. Para “2 Chains” recupera a su viejo amigo M1OnTheBeat con el que nos regala esas maravillosas cuerdas que arrastra desde el inicio. Y, por último, destacamos la importancia de introducir en su universo una figura como Scribz Riley (Cardi B, H.E.R, Khalid) en “Cry”, hecha sobre un sampler de “Put Your Hands Wher My Eyes Could See” de Busta Rhymes, para decirnos que One también sabe cantar y que le interesa aproximarse a un terreno mucho más RnB-pop (ha sido elegido como último single para promocionar la mixtape).

El desarrollo creativo de Headie One no tiene límites. Nos da la sensación de que, a pesar de que su público solo espera de él que mantenga su sonido más conservador, el artista está dispuesto a arriesgar y experimentar en futuros lanzamientos. Su álbum debut supuso una especie de borrón y cuenta nueva. El resultado de ese intento de demostrar a todos su poder y su capacidad de convocatoria (en el disco participaron Skepta, Future o AJ Tracey entre otros) ya ha cumplido su función. Todo esto forma parte del pasado, el trono del drill se le está quedando pequeño y hay muchos más caminos que conquistar. Por esta razón, “Too Loyal For My Own Good” es tan importante en su carrera. Porque supone la semilla hacia nuevas oportunidades. El manifiesto de un artista que ya conoce la fama desde dentro, sabe cómo controlarla, y tiene muy claro hasta donde quiere llegar. Un recordatorio, cargado de autenticidad, sobre sus prioridades en la vida en el que destaca la importancia de no fallar a todos aquellos que te han colocado donde estás a día de hoy.